Instituto de Cardiología expone sus logros

Al arribar a sus 50 años de servicios, el Instituto Dominicano de Cardiología exhibe entre sus logros una de las menores tasas de mortalidad, alta calidad de atención y ser pionero en la formación e investigación, pero la gran demanda de pacientes que recibe desborda su capacidad, obligándolo a referir a otros centros entre 10 y 12 pacientes cada día.

Esto preocupa a sus autoridades que ven la imperiosa necesidad de ampliar su capacidad de internamiento, presupuesto que no disponen, por lo que piden el apoyo del Presidente de la República para concluir dos pisos de construcción que tienen en proyecto, lo que le permitía incrementar dos veces su número de camas que actualmente es de 62 y por ende abarcar más pacientes de escasos recursos, que son sus principales usuarios.

Las inquietudes al respecto, los logros y portes de la institución, la incidencia de las enfermedades cardiovasculares y su prevención, fueron expuestas por los doctores Héctor Mateo, presidente de la Fundación Dominicana de Cardiología y fundador del instituto; el director médico, Ernesto Díaz Álvarez;  la subdirectora Mayra Melo, y los especialistas y directores de servicios, Carlos Rivera Payano, César Gesurum y Frank Valdez.

Los principales directivos de la institución participaron en el Desayuno de Listín Diario, encabezado por su director Miguel Franjul, el subdirector, Fabio Cabral y el coordinador del encuentro, Fernando Quiroz.

El doctor Díaz Álvarez  dijo que la institución está muy agradecida con las atenciones que le ha dispensado el presidente Medina, las autoridades de Salud y sus asistentes cuando ha tenido acercamiento, pero que necesita que el mandatario dé una mirada a esa institución que es donde tienen acceso a atención de alta tecnología y humanización la mayoría de los pacientes de escasos recursos económicos.

Destacó que los factores de riesgos y las enfermedades cardiovasculares llevan un ritmo preocupante en el país, donde el número de afectados se incrementa cada día, y que ante ese panorama la capacidad de la institución se vuelve precaria, debido a que la falta de espacio desborda su capacidad, manteniéndola desde hace tres años con una ocupación de un 100 por ciento.

Subvención
Lamentaron que siendo una institución sin fines de lucro, que ofrece servicios a una gran cantidad de pacientes de escasos recursos, siga recibiendo del Estado una subvención de apenas 1.5 millones de pesos, que solo le alcanzan para pagar la energía eléctrica.

“Yo dije una vez que el Instituto de Cardiología es la cenicienta del sector, tengo 50 años pidiendo ayuda para la institución, y un día llegué a decir que no iba a pedir más limosnas”, señaló el doctor Mateo.

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BAJA TASA DE MORTALIDAD
Los directivos del Instituto Dominicano de Cardiología aseguran que pese a ser un centro de referencia nacional y que su población de paciente es de escasos recursos, que llega en la mayoría de los casos con sus males de salud agravados, el Instituto de Cardiología exhibe la tasa de mortalidad más baja del país, estando en el 2013 en 4.8 por ciento. Entienden que esa baja tasa de mortalidad debe ser orgullo no sólo de la institución sino del país.

Otro logro que citan es en materia de formación de recursos humanos especializados, aportando al país 160 cardiólogos y 23 ecocardiografistas en las 38 promociones que ha tenido, lo que aseguran, significa un ahorro al Estado de 994 millones 500 mil pesos.

En el área de la investigación, área en la que es pionera, ha realizado más de 100 estudios.

Riesgos por falta de prevención

Para los ejecutivos y especialistas del Instituto Dominicano de Cardiología es de gran preocupación el alto índice de enfermedades cardiovasculares que hay en el país, y la no existencia de programas preventivos de parte ni del sector público ni privado.

Revelaron que en República Dominicana se estima que hay dos millones de personas hipertensas, de las cuales sólo el 20 por ciento está bien tratada, mientras que el 80 por ciento no recibe el tratamiento adecuado o desconoce su condición.

Dijeron que el 35 por ciento de la población es hipertensa; el 10 por ciento diabética y el 26 por ciento tiene obesidad, que son factores de riesgos que llevan a desarrollar enfermedades cardiovasculares, a lo que se suma la vida sedentaria, la mala alimentación, la falta de ejercicios físicos rutinarios, el fumar y tomar alcohol sin la debida moderación.

Dijeron que el Estado no tiene programas preventivos y que tampoco lo hacen las Administradoras de Riesgos de Salud (ARS), cuyas labores se enfocan en lo curativo, sin pensar que con la prevención se obtienen mejores logros para la población.

Recomendaciones
El doctor Héctor Mateo recordó que la alta presión es el enemigo silencioso,  que no da síntomas, que se deben hacer cambios en el estilo de vida para prevenirla, y que una vez se tiene e inicia el tratamiento no debe suspenderse.

Recordó que por 38 años ha estado realizando la caminata del corazón, como manera de incentivar el ejercicio físico rutinario entre la población. Entiende que la enseñanza de los estilos de vida saludable deben empezar en la niñez, porque se ha comprobado que lo que se aprende antes de los 10 años de edad, es una práctica que se mantiene para toda la vida.

La subdirectora Mayra Melo explicó que durante el 2013, el Instituto ofreció un total de 66,051 consultas, de las cuales 51,196 son de cardiología. Registró 12,176 emergencias, 3,766 internamientos, 278,855 laboratorios y 23,069 ecocardiogramas.

Desde el año 1995, cuando puso en marcha su servicio de hemodinamia, ha realizado 7,308 procedimientos. En el servicio de electrofisiología, que dirige el doctor Valdez, se han realizado desde  2007 hasta la fecha 3,126 procedimientos entre ellos marcapasos, ablaciones, Tilt Test y desfibrilación.

En cuanto a cirugía de corazón abierto, el instituto ha realizado desde 1998 hasta la fecha, 1,310 cirugías, de las cuales 549 fueron revascularizaciones y 513 reemplazo valvular.

Fuente: www.listin.com.do