Por primera vez en Norteamérica y segunda en el mundo, ha nacido en el Cleveland Clinic un bebé del útero que había sido trasplantado de una donante fallecida.
«No podríamos haber tenido un mejor resultado. Todo salió de maravillas en el parto; a la madre y al bebé les está yendo muy bien», dijo Uma Perni, especialista en medicina maternofetal del Cleveland Clinic.
«Es importante recordar que todo este procedimiento está todavía siendo estudiado. El campo del trasplante de útero está evolucionando rápidamente y es emocionante ver cuáles opciones habrá para las mujeres en el futuro».
El trasplante y el parto forman parte del ensayo clínico en curso del trasplante uterino para el tratamiento de la infertilidad debida al factor uterino en el Cleveland Clinic, que ofrece esperanza a las mujeres de todo el mundo que no pueden dar a luz debido a la infertilidad causada por el factor uterino.
Se estima que, en todo el mundo, 1 de cada 500 mujeres en edad fértil se ven afectadas por este problema irreversible.
En junio, el equipo de investigación, compuesto por especialistas en cirugía de trasplante, obstetricia y ginecología, fertilidad, neonatología, bioética, psiquiatría, enfermería, anestesiología, enfermedades infecciosas, radiología intervencionista, defensa del paciente y trabajo social, recibió a la bebé mediante cesárea. El útero, que se obtuvo de una donante fallecida, fue trasplantado a finales de 2017.
A fines de 2018, la madre, que tiene unos 30 años, quedó embarazada mediante la fertilización in vitro.
«Fue sorprendente lo perfecto que resultó este parto, considerando lo extraordinario de la ocasión», dijo Andreas Tzakis, cirujano de trasplantes del Cleveland Clinic. «Mediante esta investigación, nuestro objetivo es hacer que estos extraordinarios eventos sean comunes para las mujeres que eligen esta opción. Estamos agradecidos con la donante y su familia, su generosidad permitió que el sueño de nuestra paciente se hiciera realidad y que naciera un nuevo bebé».
“La medicina está en constante evolución. Me siento honrado de ser parte de un equipo que se dedica a la excelente atención del paciente y al avance de la medicina. Este ensayo clínico refleja la tradición de innovación en medicina clínica del Cleveland Clinic”, dijo Tommaso Falcone, profesor de obstetricia y ginecología del Cleveland Clinic y expresidente del Obstetrics and Gynecology and Women’s Health Institute de Cleveland Clinic.
«El trabajo en equipo que se necesitó para lograr que esto sucediera a nuestro paciente fue extraordinario, me siento muy orgulloso».
Desde que el Cleveland Clinic comenzó el ensayo clínico, el equipo ha completado cinco trasplantes de útero; tres trasplantes tuvieron éxito y dos resultaron en histerectomías. Actualmente, dos mujeres están a la espera de la transferencia de embriones, mientras que varias candidatas más están en la lista para el trasplante.
El objetivo es inscribir a diez mujeres entre las edades de 21 y 39 años. A diferencia de los esfuerzos de investigación similares que se realizan en EE. UU., el protocolo del Cleveland Clinic exige que el útero que se vaya a trasplantar provenga de una donante fallecida para eliminar el riesgo a una donante viva y saludable.
Cleveland Clinic es un centro médico académico, sin fines de lucro y con varias especialidades que integra la atención clínica y el cuidado hospitalario con la investigación y la educación.
Ubicada en Cleveland, Ohio, la clínica fue fundada en 1921 por cuatro médicos de renombre con la visión de proporcionar atención médica al paciente basándose en los principios de cooperación, compasión e innovación.