San José.- Un grupo técnico de cuatro personas del Instituto Nacional del Cáncer y del Hospital del Salvador de Chile visitó Costa Rica durante una semana, en el marco de un convenio de cooperación bilateral, para dar a conocer a los equipos de salud de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), los avances y los alcances de la rehabilitación de pacientes con cáncer de cabeza y cuello.
Para el terapeuta Pablo Vásquez Lara, el cáncer de cabeza y cuello es una enfermedad compleja que puede afectar severamente la capacidad del paciente de comunicarse, comer, interactuar con su entorno y reinsertarse socialmente, por eso la rehabilitación trabaja para que los pacientes puedan comunicarse o alimentarse adecuadamente, con el objetivo de impactar favorablemente su calidad de vida.
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En Costa Rica el impacto de la enfermedad en hombres es de 7 por cada cien mil y la incidencia en mujeres es de 3 por cada cien mil, en promedio 70 casos al año, y representa el 13% de los cánceres en mujeres.
Durante esta visita, en conjunto con la contraparte costarricense, Dra. Hannah Diermissen Rodríguez, Dra. María Félix Sánchez Solera, Dra. Paula Vargas y Dra. Vanessa Uclés Villalobos, trabajaron en la elaboración de un manual de procedimientos para el modelo de cuidados continuos en cáncer.
Los cánceres de cabeza y cuello se agrupan los cánceres relacionados con cavidad oral, faringe y laringe. Otros tumores de la zona, como el de glándulas salivales o senos paranasales son tumores poco comunes.
Según la literatura médica, el objetivo del tratamiento de cánceres de cabeza y cuello es controlar la enfermedad, pero los médicos se preocupan también de preservar, tanto como sea posible, la función de las zonas afectadas y de ayudar a que el paciente regrese a sus actividades normales lo más pronto posible después del tratamiento.
La rehabilitación es una parte muy importante de este proceso. Las metas de la rehabilitación dependen de la extensión de la enfermedad y del tratamiento recibido por el paciente.
