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antiago de los Caballeros.- Más de 80 médicos se reunieron en el auditorio de Ciencias de la Salud de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra para saber qué hacer ante un desastre natural.
En la actividad participó como expositor el doctor Robert Fuller, miembro de Médico sin Fronteras en el estado de Connecticut y docente de la universidad de Uconn.
El doctor Fuller ha brindado asistencia en varias catástrofes de la región, incluyendo el caso terremoto de Haití y el huracán en Jamaica.
“Primero debemos esperar que pase el acontecimiento natural y después brindar asistencia. Sí estamos en medio del huracán y volamos podríamos generar una crisis”, destaca Fuller.
“En momentos de crisis se necesita el liderazgo de los médicos, ya que los pacientes están desesperados buscando ayuda y los galenos son los responsables de decirles qué hacer y en qué área colocarse para asistirlos”, explicó Fuller.
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Otro de los expositores fue el doctor Juan González, profesor y jefe del departamento de Medicina de Emergencia de la Universidad de Puerto Rico. Fue parte del cuerpo médico que brindó socorro ante el paso del Huracán María en la isla.
González explicó qué hay cuatro puntos fundamentales que debe tener en cuenta un hospital al momento de una catástrofe: agua potable, tener una buena reserva de combustible y un generador eléctrico listos para suplir de energía eléctrica al hospital, tener suministros básicos en grandes cantidades y tener un lugar seguro donde el personal de salud pueda brindar la ayuda.
El especialista explicó qué hay pacientes que hoy todavía tienen dificultad para recibir atención médica en Puerto Rico producto del huracán.
Contó además que, la mayoría de pacientes en momentos de catástrofe llega por cuenta propia.
La actividad científica contó con la participación del ingeniero Osiris de León, geólogo, quién explicó cómo deben estar construidas los hospitales para resistir terremotos y qué deben tener las ventanas para soportar los fuertes vientos.
El simposio organizado por la residencia de Emergencia del Hospital José María Cabral y Báez, contó con la participación de más de 50 médicos, entre especialistas, residentes, médicos generales y estudiantes.
Por Indira Vásquez
