Santo Domingo.- Este 6 de junio se conmemora el Día Mundial de la Hidradenitis Supurativa, afección cutánea de la que no muchos hablan pero que afecta a un importante porcentaje de la población dominicana.
La conmemoración de este día busca ayudar a las personas a conocer más detalles, los síntomas y la importancia de un diagnóstico rápido para el tratamiento de esta enfermedad.
Está considerada como una de las enfermedades dermatológicas con más impacto en la calidad de vida del paciente, es conocida bajo distintos nombres como hidrosadenitis supurativa, enfermedad de verneuil o golondrinos.
La HS es una enfermedad crónica causante de protuberancias dolorosas, parecidas al acné, que se forman debajo de la piel. A menudo afecta áreas donde la piel se frota, como las axilas y la ingle.
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La doctora Solange Reynoso, médico especialista en hidradenitis supurativa, explica que “en el marco de esta conmemoración por el Día Mundial de la HS, creemos que es una excelente oportunidad para informar a las personas sobre esta enfermedad, que puede pasar desapercibida los primeros meses pensando que se trata de una alergia. Es importante que todos sepamos cómo identificar los síntomas y acudir al doctor para tener un diagnóstico acertado y, de esta forma iniciar, con el tratamiento correcto”.
Aunque no se tienen registros concretos, la especialista expresa que en la República Dominicana “la incidencia anda cerca de un 1.2 por ciento que es muy similar a la de Estados Unidos que es de 1 por ciento”.
Reynoso detalla que la enfermedad se trata dependiendo de la agresividad del cuadro “las formas más leves se trata con crema, jabones o antibióticos de manera antiinflamatoria”.
Agrega que cuando el paciente presenta un cuadro de moderado a severo debe ser tratado con el fármaco adalimumab (único aprobado por la FDA), “este es un medicamento que está amparado por el Programa de Alto Costo, cuyo costo mensual es de aproximadamente 200 mil pesos”.
A diferencias de otras enfermedades dermatológicas que no tienen cura, la HS tiene a su mano una “solución definitiva” que son las cirugías.
“Estas se hacen cuando con medicamentos se logra la estabilidad de la enfermedad”, precisa la especialista.
Se ha determinado que esta enfermedad no es contagiosa y tampoco surge como efectos de una mala higiene, especialistas aseguran que la genética, el medio ambiente y factores hormonales pueden incidir en su aparición.
Existen otros factores que pueden empeorar los síntomas como el exceso de peso, el estrés, los cambios hormonales, el calor o la humedad.
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Los pacientes afectados por la enfermedad, presenta comedones (espinillas o barros) que a menudo aparecen en pares o en un patrón de «doble cañón”.
Además presentan bultos dolorosos del tamaño de un guisante, cuya afección generalmente comienza con una sola protuberancia dolorosa debajo de la piel que persiste durante semanas o meses.
Con el tiempo se pueden llegar a formar tractos que conectan las protuberancias debajo de la piel. Estas heridas sanan muy lentamente, si es que sanan, y pueden supurar con olor.
La información fue suministrada en una conferencia de prensa virtual sobre el tema, apoyada por ABBVIE.
Por Dayana Rodríguez Azócar
