Santo Domingo.- En el marco de la celebración del Día Internacional de la Incontinencia, la empresa Kimberly-Clark (CK) y su marca Plenitud realizó una serie de recomendaciones necesarias para afrontar adecuadamente la incontinencia y derribar los perjuicios en torno a esta condición.
La incontinencia urinaria es la fuga involuntaria de orina, es decir, falta de control sobre la vejiga, que va desde pequeños escapes hasta niveles más intensos. Si bien, a nivel global, hay más de 200 millones de personas que padecen de esta condición, la mayoría de los hombres y mujeres lo tratan en silencio y no acuden a tratamientos médicos; se estima que 1 de cada 4 mujeres sufre perdidas de orina a partir de los 35 años y uno de cada 4 hombres a partir de los 40 años.
Es importante concientizar a las personas sobre la incontinencia, acerca de los tipos y tratamientos, para prevenir que la persistencia de este tabú deteriore la situación de los hombres y mujeres que padecen esta condición. Por ello, fueron compartidas por KC algunas recomendaciones para darle a esta condición el tratamiento adecuado:
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Conozca sus disparadores: cada caso es particular y la incontinencia puede depender de distintos disparadores, no obstante, las comidas ácidas o pimentadas, pueden agravar la condición. Debe estar atento a las comidas, bebidas y/o actividades que estén relacionados con los episodios de escape de orina.
Ejercicios de fortalecimiento: una forma útil de reducir las fugas es fortalecer los músculos de su suelo pélvico. Puedes hacer esto con yoga, pilates, tai chi, caminadas y ejercicios Kegels. El truco es asegurarse de tener la forma correcta: se necesita práctica para encontrar y apretar correctamente los músculos del piso pélvico.
Conexión nutricional: el sobrepeso, la dieta y la obesidad están estrechamente vinculadas con la incontinencia. Sin embargo, modificaciones simples, como cambios menores en la dieta o pérdida de peso, pueden tener un gran impacto en la condición.
Acuda a un médico: obtener asesoraría profesional específica para su incontinencia ofrece la mejor oportunidad de reducir e incluso eliminar las fugas. Para facilitar la conversación, escriba y comparta la siguiente información: cuándo sucede, con qué frecuencia sucede, el nivel de incontinencia y cualquier desencadenante que provoque una fuga.
Por último, estar preparada: después de un momento embarazoso, es fácil retirarse de las actividades que alguna vez amaste. Pero sentarse al margen no es la respuesta. Lleva también ropa interior y pantalones de repuesto en caso de que ocurra una fuga fuera de casa.
Por Elvys Minaya