Hipotiroidismo y sus generales maléficas hipotiroidismo es una enfermedad que afecta alrededor del tres por ciento de la población mundial y, aunque en República Dominicana no hay estadísticas certeras, se toman los números globales.
Sobre el tema nos habla la presidenta de la Sociedad Dominicana de Endocrinología y Nutrición, doctora Dolores Mejía, entrevistada en exclusiva para Resumen de Salud.
Esa entidad desarrolla una campaña sobre este mal de salud, con apoyo de laboratorios Abbott.
Les dejamos las informaciones facilitada por la especialista en nutrición:
Cifras mundiales de este padecimiento
2-3% de la población padece hipotiroidismo.
Porcentaje de hombres y porcentaje de mujeres con hipotiroidismo en nuestro país.
Desconocido.
Autoinmune
Universalmente la causa más frecuente del hipotiroidismo es la llamada tiroiditis de Hashimoto, que afecta casi a cuatro de cada 1.000 mujeres cada año y a casi 1 de cada 1.000 varones cada año.
Se trata de una enfermedad autoinmune, es decir de una reacción del organismo frente a un tejido propio, en este caso el tiroides.
El género con más problemas
Es 8 a 10 veces más frecuente en la mujer, con una media de edad de 60 años, aunque puede aparecer en cualquier sexo y edad.
50% de los casos se diagnostica por casualidad, debido a la ausencia de signos en las fases tempranas.
La detección se lleva a cabo a través de la determinación de la tirotropina (TSH), que es una hormona que se eleva de manera muy sensible cuando la tiroides reduce su función.
¿Qué es el Hipotiroidismo?
Enfermedad que se caracteriza por la disminución de la actividad funcional de la glándula tiroides y el descenso de secreción de hormonas tiroideas2.
¿Cuáles son sus causas?
La realidad es que la causa más común de hipotiroidismo es la enfermedad tiroidea autoinmune. Pero hay algunas circunstancias que favorecen la aparición de esta alteración de la tiroides:
· Antecedentes familiares
· Tener otra enfermedad autoinmune como diabetes mellitus tipo 1, artritis reumatoide, esclerosis múltiple, enfermedad celíaca, enfermedad de Addison, anemia perniciosa, vitíligo o incluso encanecimiento prematuro. También puede ocurrir en personas con síndrome de Down, síndrome de Turner o enfermedad bipolar.
· El riesgo va aumentando a mayor edad.
· Es más frecuente en mujeres que en hombres.
· El índice de hipotiroidismo aumenta durante el embarazo, después del parto y en la pre- menopausia.
· La deficiencia de yodo en la dieta
¿Cuáles son sus síntomas?
Provoca disminución del metabolismo basal, cansancio, sensibilidad al frío y, en la mujer, alteraciones menstruales.
• Las expresiones faciales abotagadas
• la voz es ronca
• Pensamiento lento
• Los párpados están caídos, los ojos y la cara ofrecen un aspecto hinchado y abultado.
• Muchas personas aumentan de peso
• estreñimiento.
• Algunos pacientes son incapaces de tolerar el frío.
• El cabello se vuelve ralo, áspero y seco
• la piel cambia a áspera, gruesa, seca y escamosa.
• las uñas se ven afectadas y son quebradizas y débiles.
• En muchos casos, se desarrolla el síndrome del túnel carpiano, que provoca hormigueo o dolor en las manos.
• El pulso se vuelve más lento
• las palmas de las manos y las plantas de los pies aparecen un poco anaranjadas (carotenemia).
• Algunas personas, sobre todo la gente mayor, se vuelven olvidadizas y parecen confusas o dementes.
Si no se trata puede llegar a un caso extremo produciendo un coma mixedematoso. Es poco frecuente. Tiene lugar cuando el nivel de la hormona T4 es extremadamente bajo. Se caracteriza por:
• Temperatura por debajo de lo normal.
• Disminución de la respiración.
• Presión arterial baja.
• Glucemia baja.
• Falta de reacción o respuesta.
En caso de que el hipotiroidismo lo padezca un recién nacido, los signos más característicos son:
• Cara de apariencia hinchada.
• Mirada triste.
• Lengua larga que sobresale de la boca.
Cuando se trata de una paciente embarazada existen unos síntomas que distinguen el hipotiroidismo de las complicaciones normales del embarazo:
• Problemas oculares.
• Temblores de manos.
• Hipertensión arterial.
• Bocio.
• Debilidad muscular.
• Defecación más frecuente.
• Separación de las uñas del lecho ungueal.
¿Cómo se diagnostica?
Pruebas de laboratorio, Medición de T4 libre y TSH ultrasensible.