Primer aniversario del Servicio Nacional de Salud

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Les dlafontein.jpgejamos un artículo del doctor Roberto Lafontaine, gestor en salud, quien destaca la importancia de la creación del SNS en el nuevo concepto de administración hospitalaria más allá de la gestión tradicional:

La semana transcurrida entre el domingo 28 de agosto y el sábado 3 de septiembre del año en curso, será recordada como una de las más importante en la historia de la reforma del sistema de salud del país, pues, un acontecimiento y dos conferencias magistrales efectuadas en el marco de la celebración del primer aniversario del Servicio Nacional de Salud (SNS), servirán de testimonio.

El impacto del consenso logrado entre la comisión gubernamental y los dirigentes del Colegio Médico Dominicano (CMD), tan esperado por el colectivo social, aunque si bien es cierto eclipsó la divulgación del conocimiento de la temática de las conferencias, no así su importancia para llevar la implementación del proceso de reforma a un nivel tal para que la población comience a recibir los tan pregonados beneficios.

La no discrepancia, entre los comisionados, sobre el tema de la jornada laboral, allana el camino para completar los requerimientos necesarios para la firma del acuerdo, que determinará la incorporación del médico a la dinámica reformadora de la producción de los servicios de salud en los hospitales.

Con ello se crean las condiciones para dejar atrás el enfoque de gestión de los servicios de salud en los hospitales tradicionales. Un modelo de contingencia, que tiene por principio que las acciones administrativas apropiadas de una empresa en una situación determinada depende de los parámetros particulares de la situación; por lo que el funcionamiento dependerá del desarrollo particular de factores contingentes, tales como: el tamaño de la organización, el grado de interacción de sus estructuras, la personalidad de los miembros, la congruencia de las metas, las técnicas usadas en la toma de las decisiones y la eficiencia del sistema.

Es natural que, después del largo tiempo transcurrido desde la puesta en vigencia del marco legal que manda la reforma del sector salud, caracterizado el mismo por la formulación de políticas no eslabonadas con la gestión en los hospitales, los factores contingentes se desarrollaran sin control, adquiriendo vida cancerígena propia, situación que afecta la relación interdependiente necesaria para mantener una adecuada producción de los servicios de salud.

De ahí los altos niveles de insatisfacción, la poca humanización de los servicios, la epidemia de efectos adversos y los elevados niveles de mortalidad evitable que caracteriza la gestión hospitalaria.

La sensación de alivio es grande, pero el reto abruma, porque al quedar despejado el camino el colectivo social se hace la pregunta, ¿y ahora qué? si no existen los recursos necesarios para implementar el modelo planteado y la voluntad política no está priorizada, por lo no se avizora el momento de cambio del contexto de la baja inversión. Son parte de los retos que tiene de frente la institución que recientemente cumple el primer aniversario de nacimiento y que en medio de una profunda crisis del sector salud, el Presidente de la República, Lic. Danilo Medina Sánchez confió su dirección al Dr. Nelson Rodríguez Monegro.

Los temas de las conferencias magistrales y la calidad de los conferencistas, vienen a tono con el momento de reforma del sector salud. Mejora en la Eficiencia y la Calidad de los Procesos Asistenciales en el SNS y Gestión Productiva de los Servicios de Salud en el Marco de las Redes Integrales de Servicios, pronunciadas por el Dr. Javier Cabo una y el Dr. Reynaldo Holder, consultor de la OPS, la otra.

Con el Dr. Cabo vimos como a pesar de ser los hospitales empresas de la más elevada complejidad la producción de los servicios de salud puede ser sencilla, eficiente y eficaz; mediante la estandarización de los procesos indispensables para una gestión clínica de elevada calidad y con un optimo consumo de recursos; sobrepasando, además, las expectativas de los pacientes. Demuestra el doctor, como usando el enfoque de la organización de los procesos asistenciales y la asignación de los costos se mejora la eficiencia administrativa y se eleva, a la vez, la calidad de los servicios demandados por la población.

El Dr. Holder, mostró la tendencia de la postmodernidad cuando un país decide cambiar el modelo de atención en salud. De tener la salud como un bien y al paciente como centro pasar a ver la salud como derecho fundamental enfocado a las personas, familias y comunidades.

También, señaló el camino para actuar correctamente enfocando la organización y el funcionamiento del SNS en redes de servicios de salud, con diferentes niveles de complejidad de los prestadores, para hacer cercana a la población la oferta integral de los servicios que necesitaren para elevar el estado de salud con la mayor satisfacción de sus expectativas, la más elevada calidad técnica de los servicios y el menor riesgo posible en la atención.

Al finalizar la semana la senda queda clara. Para el mediano plazo, determinar la magnitud del costo de los recursos necesarios para llenar la brecha faltante para formar la red de servicios de salud, ejercer la abogacía necesaria para lograr el aumento de la inversión pública, formular inteligentes acuerdos de gestión para lograr la integración del subsector privado en el mediano y, en el corto plazo, lograr la fortaleza institucional del SNS, completar la construcción y el remozamiento de los hospitales y cambiar la cultura laboral hospitalaria, mediante la implementación de un nuevo enfoque de gestión en la producción de los servicios de salud para que la población reciba los beneficios planteados con la reforma del sistema de salud.

Existen elementos suficientes para decir que se observa cercana la luz al final del túnel. Que el SNS, bajo la dirección del Dr. Nelson Rodríguez Monegro, logrará elevar el estándar en la calidad de la atención hospitalaria al nivel requerido para que el sector público de los servicios de salud haga su aporte para impactar los negativos indicadores de salud que diezman a la población dominicana.

Por Roberto Lafontaine