Estados Unidos.- Una nueva IA puede ayudar a detectar el cáncer de mama que se está propagando a otras partes del cuerpo, sin necesidad de biopsias, encuentra un estudio reciente.
La IA analiza las resonancias magnéticas para detectar la presencia de células cancerosas en los ganglios linfáticos debajo de los brazos, dijeron los investigadores.
En la práctica clínica, la IA podría ayudar a evitar el 51 por ciento de las biopsias quirúrgicas innecesarias para analizar los ganglios linfáticos en busca de cáncer, al tiempo que identificaba correctamente al 95 por ciento de las pacientes cuyo cáncer de mama se había propagado, mostraron los resultados.
La mayoría de las muertes por cáncer de mama se deben a un cáncer que se ha propagado a otros lugares, y por lo general el cáncer se propaga primero a un ganglio linfático de la axila, explicó el investigador principal, el doctor Basak Dogan, director de investigación sobre imágenes mamarias del
Centro Médico Southwestern de la UT.
Encontrar el cáncer que se ha propagado a un ganglio linfático «es fundamental para guiar las decisiones de tratamiento, pero las técnicas de imágenes tradicionales por sí solas no tienen suficiente sensibilidad» para detectarlo de forma efectiva, señaló Dogan en un comunicado de prensa del centro médico.
Las pacientes con hallazgos benignos en los exámenes de IRM o en las biopsias con aguja con frecuencia deben someterse a una biopsia quirúrgica de ganglios linfáticos de todos modos, porque esas pruebas pueden pasar por alto un buen número de células cancerosas que se han propagado más allá de la mama, dijo Dogan.
Los investigadores entrenaron a la IA alimentando el programa con resonancias magnéticas de 350 pacientes con cáncer de mama recién diagnosticadas que se sabe que tienen cáncer en los ganglios linfáticos.
Las pruebas mostraron que la IA recientemente desarrollada era significativamente mejor para identificar a estos pacientes que los médicos humanos que usaban resonancia magnética o ultrasonido, informaron los investigadores en una edición reciente de la revista Radiology: Imaging Cancer.
«Es un avance importante porque las biopsias quirúrgicas tienen efectos secundarios y riesgos, a pesar de tener una baja probabilidad de que un resultado positivo confirme la presencia de células cancerosas», explicó Dogan. «Mejorar nuestra capacidad de descartar [células cancerosas en los ganglios linfáticos] durante una IRM de rutina, usando este modelo, puede reducir ese riesgo al tiempo que mejora los resultados clínicos».