Los países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) expresaron su preocupación ante el posible riesgo de que el virus del Zika se convierta en pandemia con consecuencias graves para la salud humana y la economía mundial, por lo que acordaron coordinar esfuerzos con la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para encabezar una respuesta regional.
La decisión está contenida en la Declaración del Virus del Zika, adoptada durante la 46ta. Asamblea General de la OEA, celebrada en el país, indica una información publicada por el periódico Diario Libre.
En el documento, las naciones reconocieron el aumento reciente en la diseminación del virus del Zika en Latinoamérica y el Caribe, acompañado de evidencias científicas de que puede provocar deformaciones congénitas, como la microcefalia y otros síndromes neurológicos, como el de Guillain-Barré.
“Profundamente preocupados por la vulnerabilidad de los diferentes Estados Miembros y sus poblaciones, en particular las mujeres embarazadas y aquellas en edad reproductiva, a la epidemia del Zika, debido a que no existe tratamiento ni vacuna específica”, refiere la motivación de la declaración de los 34 países miembros de la OEA.
La información fue difundida este lunes por el periódico Diario Libre.