El banco de leche humana de la Maternidad Nuestra Señora de La Altagracia ha garantizado la supervivencia a cerca de veinte mil recién nacidos de madres con insuficiencias para lactar.
De a cuerdo con la información ofrecida por el viceministro de Cooperación Internacional del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, Inocencio García Javier, se han recolectado casi 2.0 millones de centímetros cúbicos equivalentes a unas 67 mil onzas.
Explicó que ese es el resultado del intercambio de recursos, tecnología y conocimientos de la modalidad de cooperación sur-sur, entre la República Dominicana y Brasil.
Desde su instalación en el 2012 el banco de leche contribuye a la reducción de la mortalidad infantil, y tuvo su primera pasteurización de unos 457 centímetros cúbicos en octubre de ese año.
“En el primer año recolectamos cien mil centímetros cúbicos, en el siguiente otros cien mil, que aumentaron después a trescientos mil, y en los años siguientes a cuatrocientos mil. Y el pasado 2017, a más de 450 mil”, aseguró su director, el doctor Santiago Martínez.
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El funcionamiento y los resultados que ha tenido el banco fueron constatados recientemente en una visita del ministro de Salud Pública de Brasil, Ricardo Barros, acompañado del embajador de ese país Clemente Baena Soares; el ministro consejero de la legación, Antonio Baptista Luz Filho, y el primer secretario, Johnny Wu, y otros funcionarios de ese país.
Barros resaltó la importancia de los bancos de leche en la reducción de la mortalidad infantil por esa causa anunció la disposición de la Agencia Brasileña de seguir cooperando con la República Dominicana en ese sentido.
Consideró que el banco es parte del arsenal terapéutico de respuesta a la mortalidad infantil al garantizar el alimento en las áreas de perinatología y neonatología sobre todo a los recién nacidos ingresados en la unidad de cuidados intensivos natal, con una alta población de prematuros de muy bajo peso.
Agregó que cuentan con las contribuciones de mujeres con hijos nacidos en clínicas privadas que se presentaron voluntariamente y donan excedentes, por lo que en 2012 fueron reconocidas como “donantes estrellas”.
También aporta el grupo Pro lactar-RD, cuyas integrantes donan periódicamente diez mil centímetros cúbicos y tienen organizadas a otras donantes en varias provincias del país.
Este banco además es apoyado por organizaciones no gubernamentales, entre ellas la Liga de la Leche, una institución cuyos directivos gestionaron la donación de extractores.