Santo Domingo.- Actualmente mantener la calma es un reto para nuestra sociedad.
La difusión de noticias falsas a través de las redes sociales, la carga de noticias a través de la prensa y la televisión, comentarios de vecinos y el mismo incremento de casos y fallecimientos, sumado a la afectación de familiares cercanos, ha contribuido a aumentar los niveles de ansiedad en nuestra sociedad, teniendonos inmersos en un impactante trauma global.
La ansiedad es definida como la anticipación de un daño o desgracia futura, acompañada de sentimiento desagradable, es decir, una sensación o un estado emocional ante determinadas situaciones estresantes y se caracteriza por la presencia de preocupación, miedo o temor excesivo que provoca un deterioro clínico significativo de la actividad del individuo.
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Para evitar este cuadro se recomienda a la población dosificar la información sobre la pandemia, es decir, poner un límite a la cantidad de artículos que lee o por cuánto tiempo leerá sobre el coronavirus cada día.
Si está consumiendo medios que lo están poniendo ansioso (fotos de largas filas en las tiendas, personas acumulando suministros, celebridades diagnosticadas), tómese un descanso.
Estar informado es una cosa; estar sobreexpuesto es otra.
Agregando también realizar actividades físicas en casa, hacer actividades de cosas que guste, dormir bien, leer libros, meditar, y comunicarse con sus seres queridos a través de llamadas o video llamadas.
Annis Marcellis Recio Taveras.
Estudiante de quinto año de medicina de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD)
