Santo Domingo.- La República Dominicana registra en lo que va de año 941 casos de dengue y 9 fallecimientos por esta causa, confirmó el Ministerio de Salud Pública que, destacó una reducción respecto al mismo periodo del año pasado.
El boletín epidemiológico semanal indica que en los últimos siete días se confirmaron seis casos de la enfermedad. Los casos sospechosos en lo que va de año, sin embargo, superan los 8,000.
Deterioro hepático: El virus del Dengue, puede infectar directamente el hígado y causar apoptosis (muerte) de los hepatocitos, lo que lleva a los hallazgos clásicos de elevación de las enzimas hepáticas.
El aumento de AST y ALT se consideran marcadores de dengue grave. Se plantea la hipótesis de que varios mecanismos son causantes de la insuficiencia hepática.
Deterioro cardíaco: La afectación cardíaca por se considera una complicación rara. El espectro de manifestaciones cardiovasculares en la infección por dengue es amplio y abarca desde cambios sutiles del electrocardiograma hasta miocarditis fulminante.
Los signos y síntomas pueden variar desde un aumento subclínico de la frecuencia cardíaca y detección desde anomalías asintomáticas del electrocardiograma hasta manifestaciones clínicas más graves como disnea, dolor torácico y muerte súbita. El diagnóstico se confirma mediante biopsia endomiocárdica o resonancia magnética cardíaca.
Deterioro renal: La insuficiencia renal en pacientes con dengue es en su mayoría leve y varía desde anomalías de los electrolitos séricos hasta hematuria (sangre en orina) y proteinuria. Los pacientes que desarrollan daño renal pueden desarrollar complicaciones más graves, como lesión renal aguda y síndrome urémico hemolítico.
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Los estudios inmunohistoquímicos realizados en muestras de riñón de casos humanos fatales de infección por dengue encontraron ARN viral y observaron una acumulación de células inmunes y congestión aguda intensa.
Las complicaciones pulmonares son raras, aunque los síntomas de las vías respiratorias superiores pueden ocurrir con frecuencia en las primeras etapas del dengue. Los pacientes con dengue pueden experimentar diversas alteraciones del sistema pulmonar, incluido derrame pleural, edema pulmonar, neumonitis, síndrome de dificultad respiratoria aguda y hemorragia pulmonar. Los mecanismos asociados son el aumento de la permeabilidad vascular y la fuga de plasma.
La trombocitopenia y las alteraciones en la coagulación son responsables de la hemorragia alveolar (pulmonar) y la hemoptisis.
Las complicaciones hematológicas relacionadas con la infección por dengue incluyen recuento bajo de plaquetas persistente. En el contexto de una púrpura trombocitopénica inmunitaria secundaria, se define como el recuento bajo de plaquetas prolongado después de la fase de recuperación.
Mujeres embarazadas: El embarazo es un factor de riesgo bien conocido para el dengue grave, ya que los cambios fisiológicos que ocurren durante la gestación a menudo pueden enmascarar las características clínicas y de laboratorio de la infección por dengue, lo que lleva a un diagnóstico erróneo.
El aumento de la presión del pulso, la hemodilución debido a la expansión del volumen sanguíneo con una disminución del hematocrito, la leucocitosis con linfopenia asociada y la trombocitopenia gestacional alteraciones sistémicas que pueden confundir el diagnóstico. Condiciones patológicas como hiperemesis (vómitos), eclampsia o preeclampsia y el síndrome HELLP (hemólisis, enzimas hepáticas elevadas y recuento bajo de plaquetas) son causas comunes de retraso en el tratamiento.
Las mujeres embarazadas tienen un riesgo 3 veces mayor de desarrollar dengue grave que se asocia con un mayor riesgo de mortalidad materna.
Adultos mayores: El manejo del dengue en pacientes de edad avanzada podría ser un desafío debido a la senescencia inmunológica, lo que resulta en presentaciones clínicas atípicas. Los estudios han demostrado que los pacientes ancianos con dengue tienen más probabilidades de presentar episodios aislados de fiebre, dolores de cabeza, erupciones cutáneas, náuseas, vómitos y confusión mental, así como leucopenia, hematocrito más alto, albúmina más baja, y experimentar recuentos de plaquetas bajas.
Los adultos mayores también tienen más probabilidades de desarrollar dengue grave porque acumulan tres factores de riesgo: deterioro inmunológico debido a la senescencia, mayor probabilidad de adquirir una infección secundaria y mayor prevalencia de enfermedades crónicas.
Pacientes diabéticos: Al igual que otras infecciones, el dengue puede precipitar cetoacidosis diabética e hiperglucemia hiperosmolar en diabéticos. Además, la hiperglucemia también puede causar diuresis osmótica, lo que puede agravar la hipovolemia. Por lo tanto, se debe controlar y tratar la glucemia elevada. Los agentes hipoglucemiantes orales pueden causar acidosis láctica y los vómitos pueden reducir su absorción.
Por lo que estos agentes deben suspenderse durante el dengue grave. Dada la falta de un antiviral eficaz, la búsqueda de una vacuna se vuelve cada vez más necesaria.
Por Dr. Rafael Bello
Médico y académico