Pacientes que se atienden en el Hospital Materno Infantil de Andrés, en Boca Chica, denunciaron hoy que el lugar se encuentra en notable estado abandono, y un personal médico reducido.
Las personas expresaron que el centro de salud no tiene energía eléctrica, ni medicamentos, pero tampoco combustible para su ambulancia.
Informaron que muchas de las camas están rotas, la edificación tiene filtraciones que ha ido deteriorando las paredes, entre otros males.
Fuente: www.hoy.com.do