Descubren otro beneficio del jugo gástrico

jugos.jpg

jugos.jpg

Un nuevo estudio sugiere que los electrolitos en ácido gástrico podrían proporcionar una fuente de energía suficientemente potente para alimentar los dispositivos electrónicos ingeribles.

Investigadores del Hospital de Brigham y de Mujeres (Boston), del Instituto Tecnológico de Massachusetts (Cambridge) y de otras instituciones, han desarrollado un monitor de temperatura corporal, prototipo, en una cápsula ingerible, que recibe su energía gracias a una batería galvánica de recolección de energía basada en una pareja redox, formada por un ánodo metálico en disolución, sometido a oxidación galvánica y un cátodo inerte, que devuelve los electrones a los fluidos gastrointestinales (GI) que forman el electrolito.

La batería bio-galvánica suministró una potencia promedio de 0,23 μW mm-2, de área de electrodo durante un promedio de 6,1 días de mediciones de temperatura en el tracto gastrointestinal de cerdos, con mediciones tomadas cada 12 segundos en promedio y enviadas de forma inalámbrica a un dispositivo remoto.

Además, los investigadores demostraron que los dispositivos prototipo podían activar la liberación de fluidos contenidos dentro del dispositivo usando la potencia cosechada, ilustrando potenciales aplicaciones terapéuticas para la administración de fármacos.

El estudio fue publicado el 6 de febrero de 2017, en la revista Nature Biomedical Engineering.

La información sobre el mismo fue tomada por Resumen de Salud del portal www.hospimedica.es