Recientemente, el pasado director del hospital regional José María Cabral y Báez, de Santiago, había convocado a un foro entre el CMD, autoridades de salud y otros actores del sistema para discutir mejoras en el sector.
Ahora, el también presidente del consejo de administración de clínica Unión Médica plantea que el ministerio de Salud Pública, realice un diagnóstico situacional, del mosquito Anopheles, para determinar la ubicación del que picó a los dos niños de la provincia Santo Domingo, que fueron ingresado afectado de malaria.
En declaraciones difundidas por el periódico La Información, el médico internista califica de preocupante y sospechoso, el hecho de que este insecto que antes su presencia se encontraba en la zona rural y seca, sobre todo en la franja fronteriza y ahora aparezcan estos dos casos en la parte urbana, de mayor concentración poblacional, como lo es el gran Santo Domingo.
“Son delicadas las condiciones medioambientales del país, sabemos del dengue, la chikungunya, zika virus y ahora estos dos casos de malaria que se han detectado en Santo Domingo, en dos niños, en edades de tres a cuatro años”, expresó.
Rivera manifestó que es grave la situación, porque el mosquito Anopheles es diferente al AEde Aegypti, éste último con mayor presencia en la zona urbana, pero el primero, que transmite la Malaria, Paludismo y la Filaria, es prácticamente rural y de zona caliente.
En ese sentido dijo que es necesario que el ministerio de Salud Pública haga un diagnóstico, para saber de dónde vino o donde se encuentra ese mosquito que picó a los niños, porque tiene que haber picado a otra persona, afectada de la enfermedad y la transmitió a estos dos pacientes, que reciben atenciones en un centro de salud de la capital.
El también director de la clínica Unión Medica fue reiterativo en señalar que es necesario determinar rápido, si es que el mosquito está en Santo Domingo, porque el mismo es tradicional de la frontera, a fin de saber si está en el área donde habitan los infectados.
Manifestó que ya sabemos que el mosquito productor del dengue, tiene que ver con la situación medioambiental, el nivel sanitario y del manejo de las aguas.
“Tenemos que dejar de ver para arriba, mirando el metro y observar hacia abajo, para ver cómo anda el suministro y el manejo del agua potable por parte de las autoridades y la población que la consume”, subrayó.
En tal sentido Daniel Rivera destacó que ahora mismo el reto de la provincia Santo Domingo, Distrito Nacional y Santiago, zona de mayor concentración poblacional, cómo se están manejando las aguas no sólo las residuales, sino también la de consumo humano, porque antes este mosquito habitaba en zona rural, pero ahora aparecen estos caso en esta urbe mayormente poblada.
El especialista de medicina interna sostuvo que en gran Santo Domingo, donde hay hacinamiento, es necesario determinar, si la población no dispone de agua potable adecuada, para garantizar la salud a los habitantes allí.
Rivera recordó que en 1972 ya las Naciones Unidas y según cita de Amartya Sen, escribía sobre la seguridad social, donde decía que el desarrollo se centra en la persona, concentrándose primero en el desarrollo social, invirtiendo en el desarrollo humano, protegiendo siempre las poblaciones más vulnerables, que no disponen de agua potable y con un manejo inadecuado de la misma.
Puntualizó que de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), 3 mil 200 millones de personas estaban expuesto al paludismo en el mundo, donde para el 2015 hubo unos 2 mil 14 millones, de los cuales 438 mil murieron, en el mundo.
Destacó que para el 2012 ya la OMS había dado una alarma en Ginebra, sobre la República Dominicana, La Guyana y Venezuela, ante un aumento de esta enfermedad, aunque posteriormente se dijo ese número representó una reducción en el país.
Frente a esa situación Rivera reiteró sobre la necesidad de que las autoridades hagan un diagnóstico, para determinar la magnitud y el lugar donde está presente el mosquito Anopheles, que causa la malaria.