Santo Domingo.- Estudio revela que covid-19 grave puede provocar partos prematuros o interrupción del embarazo. El COVID-19 grave en el embarazo tiene impacto negativo en la mujer gestante y en sus criaturas, reveló un estudio difundido por la revista científica Frontiers in Inmunology.
Entre los efectos negativos figuran partos prematuros y la interrupción del embarazo por sufrimiento fetal o muerte.
Esto en pacientes hospitalizadas que necesitaron soporte respiratorio, intubación y cuidados intensivos.
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De acuerdo a los resultados, las pacientes con formas graves de COVID-19 tuvieron más probabilidad de resultados fetales adversos, hallazgos histopatológicos de mala perfusión vascular materna y fetal e intervellositis histiocítica crónica, una infrecuente lesión placentaria.
«Un buen número de madres hospitalizadas que necesitaron soporte respiratorio, intubación y cuidados intensivos, tuvo partos prematuros o debió interrumpir el embarazo por sufrimiento fetal o muerte», explicó la doctora Lúcia de Noronha, de la Facultad de Medicina de la Universidad Católica de Paraná, Brasil.
La información fue tomada por este redactor del portal www.espanol.scape.com
Los resultados preliminares fueron obtenidos de un pequeño estudio brasileño prospectivo, de observación y con diseño de casos y controles pareados por edad, edad gestacional y comorbilidades.
La publicación del portal especializado en informaciones de la comunidad médica indica que este estudio uno de los primeros en la literatura internacional que utiliza esta metodología que despeja factores confundidores.
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Las sociedades médicas y médicos especialistas en ginecología, obstetricia y medicina perinatal tienen entre sus preocupaciones los efectos adversos del coronavirus en las embarazadas.
A esta preocupación se añade también los efectos que podrían traer la vacunación en covi-19.
En República Dominicana, las sociedades científicas especializadas en el tema han planteado que las embaradas deben llevar sus cuidados ginecológicos y no temer a la vacunación.
El tema se discute en un contexto en el que el país caribeños está colocado en el número cinco a nivel global en embarazos adolescentes y segundo en América Latina.
Por Pedro Angel
