San José.- La ausencia de protocolos en menores de 18 años durante el desarrollo de la vacuna contra el nuevo coronavirus ralentiza la inyección del medicamento en niños y jóvenes.
Esto por cuanto, al menos en el caso de los productos elaborados por Pfizer y BioNTech así como por AstraZeneca y Universidad de Oxford, partieron del precepto internacional de proteger a la niñez y de dar una solución a la población de mayor riesgo ante el SARS-CoV-2, que son las personas mayores de 58 años y las que padecen enfermedades como diabetes o hipertensión.
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El medicamento o una molécula que va llegando con la posibilidad de utilizarse en humanos, requiere de protocolos, pero que en términos generales son paquetes de fases y de medidas que se tienen que tomar para garantizar la seguridad que lo estén recibiendo.
De igual manera, esto no quiere decir que la inyección eventualmente no se podrá aplicar a niños y jóvenes, sino que es necesario contar con información que confirme su seguridad y efectividad en esa población.
A nivel mundial, una de las políticas en cuanto a lo que es el uso adecuado de medicamentos es que cuando se va a modificar el grupo de personas que tienen una autorización se requiere otra vez ser evaluado debido a que esto garantiza la seguridad de las personas, de que no se está haciendo una experimentación no controlado.
Hasta ahora, el Ministerio de Salud solo ha autorizado en Costa Rica el uso de emergencia de la vacuna de Pfizer y BioNTech.
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Dicha inyección requiere de dos dosis y utiliza la tecnología de ácido ribonucleico mensajero (ARNm), lo que la diferencia de las tradicionales. Esta novedosa técnica consiste en dar instrucciones genéticas a las células humanas para producir anticuerpos contra el virus del SARS-CoV-2.
La Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE) ha firmado acuerdos para adquirir tres millones de dosis de vacunas de Pfizer y BioNTech, para la compra de tres millones de dosis de su vacuna contra la enfermedad respiratoria. Además, se ha pactado la compra de un millón de dosis de la inyecciones de AstraZeneca-Oxford (aún en desarrollo) y dos millones que serán entregadas por el mecanismo Covax.