San José.- Actualmente se ha iniciado una investigación por parte de la Fiscalía Adjunta de Delitos Económicos, Tributarios, Aduaneros y Propiedad Intelectual por la compra de batas y su importación para el personal de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
El órgano acusador del Estado indicó que la pesquisa gira alrededor de una aparente defraudación fiscal aduanera.
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El caso hasta ahora se maneja contra ignorado; es decir, que de momento no existen personas imputadas.
La investigación se originó de una denuncia interpuesta por la Unión Médica el pasado 3 de febrero en la que se exponían supuestas anomalías en la adquisición de las batas, cuyo fin es la protección de los funcionarios que atienden la pandemia del SARS-CoV-2.
A criterio de la Unión Médica, los implementos en cuestión están diseñados para proteger de sustancias de baja peligrosidad y no a la alta exposición de «polvos muy finos», según lo hizo ver la organización en una misiva remitida a la Caja de Seguro Social.
La pesquisa se encuentra en la fase de recopilación de pruebas, que es una etapa privada para terceros, de acuerdo con lo estipulado en el artículo 295 del Código Procesal Penal.
El Ministerio Público además tiene abiertas dos causas por aparentes anomalías en la compra de mascarillas para el personal de la Caja, así como en la contratación de vuelos chárter para el traslado de equipos de protección donados por China; ambas reveladas por el diario La Nación. A estos casos se les asignaron los expedientes 20-000122-1218-PE y 20-000175-1218-PE, respectivamente.
