Una novedosa plataforma de aplicación implantable puede proporcionar quimioterapia local para tratar el adenocarcinoma del conducto pancreático (ACCP), de acuerdo con un estudio nuevo.
Desarrollado por investigadores del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT, MA, EUA) y el Hospital General de Massachusetts (MGH; Boston, MA, EUA), el implante es una película flexible de polímero biodegradable hecha de ácido poli láctico-co-glicólico (PLGA), y está diseñado para liberar dosis altas de medicamento terapéutico hasta por 60 días.
Para la aplicación, la película está enrollada en un tubo e insertada a través de un catéter; una vez este alcanza el páncreas, se desdobla y se ajusta a la forma del tumor, liberando los medicamentos integrados solo desde la cara orientada al tumor para reducir los efectos secundarios.
Para comparar la eficacia del dispositivo con la de la quimioterapia tradicional, se realizó un estudio en ratones que portaban tumores pancreáticos humanos. Un grupo de ratones fue tratado con el implante portando el medicamento de quimioterapia paclitaxel, mientras que el otro grupo recibió inyecciones del mismo medicamento durante cuatro semanas simulando el tratamiento actual para los pacientes humanos.
Los resultados mostraron que el crecimiento del tumor se hizo más lento en los ratones con el implante; en algunos casos, los tumores incluso se redujeron. Después de cuatro semanas, el grupo del implante mostró cinco veces la concentración del paclitaxel en sus tumores que en el grupo intravenoso.
Además de administrar exitosamente el medicamento al páncreas, los investigadores también observaron otros efectos positivos.
El tratamiento localizado aumentó la cantidad de tejido necrótico, y puesto que hay pocos vasos sanguíneos en los tumores pancreáticos, el paclitaxel tendió a permanecer in-situ, previniendo los efectos tóxicos en los tejidos sanos.
Adicionalmente, actuando como una barrera física, la película pudo reducir las metástasis a los órganos vecinos. El estudio describiendo el implante y el estudio murino fue publicado en la edición temprana en-línea, el 31 de Marzo de 2016, en la revista Biomaterials.