San José.- La Junta Directiva de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) conoció la última valuación actuarial del Seguro de Pensiones que administra, la cual señala el imperativo de adoptar medidas tendientes a mejorar la solvencia financiera, según se detalla en el informe.
En el documento también se establece que, en un enfoque de corto plazo, 2019 al 2030, el régimen de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) presenta un aceptable estado financiero para el período.
Los responsables del estudio, el M.A.S. Ronald Cartín Carranza, director actuarial ai y el M.Sc. Cristian Torres Jiménez, jefe del Área Actuarial ai, señalan que “afortunadamente, se cuenta con un espacio de tiempo en algún grado suficiente para debatir propuestas de mejora”.
La Junta Directiva aprobó el informe como un insumo inicial básico para el análisis técnico de los resultados de la valuación actuarial a fin de plantear planes de fortalecimiento del Seguro de Pensiones de la CCSS y acordó formar un grupo interno con este objetivo.
Balance actuarial: una foto de las proyecciones financieras traídas al presente
En el documento se afirma que este estudio actuarial proporciona los elementos necesarios para el análisis y valoración de la solvencia actuarial del Seguro de IVM y para la toma de futuras decisiones.
Y añaden que para establecer las hipótesis consideraron factores demográficos, políticos, sociales y económicos del país que inciden directamente en la escogencia de los supuestos actuariales usados para obtener las proyecciones en el corto y largo plazo.
Dos enfoques de análisis actuarial: uno de corto plazo y otro de largo plazo.
Los actuarios detallan en la perspectiva de corto plazo, 2019 -2030, “que el Seguro de IVM está en un aceptable estado de adecuación financiera de corto plazo, por el período 2019 a 2030”.
A esta conclusión llegan los autores luego de comparar los activos contables del IVM al inicio del año, con los pagos por beneficios proyectados para ese año (llamada “razón de contingencia”) y determinaron “que son al menos igual a los pagos proyectados para el año” para cada año en ese período. En este análisis se ha tomado en consideración los incrementos en aportes acordados por la Junta Directiva de la CCSS, en la sesión N° 9039 de del 20 de junio de 2019.
Así mismo, los actuarios indican que a partir del 2030 el Seguro IVM podría presentar los siguientes momentos críticos:
• Insuficiencia de los «aportes más intereses de la reserva»: año 2030
• Agotamiento total de la reserva: año 2037.
Por otra parte, en el enfoque de largo plazo, la medición se hace a través de un balance actuarial de largo plazo y de grupo abierto, tomando en consideración un período de 100 años, hasta el 2119. Valga resaltar que un Balance actuarial es una foto de las proyecciones financieras traídas al presente en un horizonte proyectado, en este caso de 100 años.
De conformidad con los resultados de este balance actuarial, que considera la situación actual del perfil de beneficios e ingresos proyectados se presenta un déficit en el largo plazo en el cual, de no tomarse las medidas de ajuste bajo las hipótesis actuariales, el Régimen no podría hacer frente a un 51.7% de sus promesas en esos 100 años.
Por otra parte, en la proyección demográfica, los actuarios señalan que es evidente que la población de pensionados crece, aún en el corto plazo, en forma más acelerada que la de la población de afiliados al IVM. En ese sentido, “la «Razón de Soporte» decrecerá de 6,9 afiliados por pensionado en el 2018 a 4,4 afiliados por pensionado en el 2030 (y posteriormente a 1,5 en el 2080)”.
Los actuarios cuantifican en el estudio múltiples opciones para mejorar la solvencia financiera del Seguro IVM, explícitamente mencionando que no se pretende recomendar acciones concretas ni brindar valores de juicio sobre los diferentes enfoques. Entre los diferentes enfoques cuantificados están: incremento de cuotas, cambios en la fórmula de cálculo de los beneficios, Incremento en las edades de retiro, reducción en los ajustes por costo de la vida y otras fuentes de Ingresos provenientes del Gobierno Central. Muchas de estas políticas y tácticas han sido ya tomadas en consideración en otras latitudes y pueden utilizarse en general para balancear un Régimen de Pensiones de Beneficio Definido.
Como ya se mencionó, los cálculos actuariales, que se basan en este tipo de modelos matemáticos, permiten proyectar o simular determinados hechos económicos atendiendo a posibles consecuencias y los costes que estas supondrían; lo cual brinda insumos a las altas autoridades de la Caja y del país para realizar los ajustes requeridos en el tiempo a fin de cambiar esas condiciones.
El análisis muestra el resultado natural de maduración del sistema de pensiones con un envejecimiento poblacional importante, que ha sido evidenciado en los estudios actuariales que se han efectuado tanto internos como externos.
Fuente: Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS)