Santo Domingo.- El aceite de pescado es una fuente de ácidos grasos omega 3 que el cuerpo humano necesita para diferentes funciones como la actividad muscular y el crecimiento celular. Desde hace décadas, se usan suplementos de aceite de pescado y se los promociona asociado a sus beneficios para la salud.
Un estudio realizado por investigadores de China, Estados Unidos, Dinamarca y Reino Unido ha señalado que el consumo de suplementos no sería tan beneficioso para las personas que están sanas.
A través de un estudio que publicaron en la revista de acceso abierto BMJ Medicine, el equipo científico reveló que el consumo regular de suplementos de aceite de pescado podría aumentar, en lugar de reducir, el riesgo de sufrir por primera vez un infarto o un ataque cerebrovascular o ictus entre las personas con buena salud cardiovascular.
Por el contrario, el consumo del suplemento sí tendría una ventaja para personas que ya tienen la enfermedad. Podría ralentizar la progresión de la mala salud cardiovascular existente y disminuir el riesgo de muerte.
Porque la mayoría de los suplementos de aceite de pescado que se comercializaban en ese país tienen etiquetas que presumen de beneficios para la salud que no están respaldados por datos clínicos, de acuerdo con Ann Marie Navar, que dirigió el estudio.
“No hay ningún beneficio cardiovascular en tomar suplementos de aceite de pescado sin receta, y en dosis altas, incluso pueden aumentar el riesgo de fibrilación auricular”, advirtió. De las 2.819 etiquetas estudiadas, 2.082 (73,9%) hacían al menos una afirmación relacionada con la salud.
En Reino Unidos, antes de empezar el trabajo publicado en BMJ Medicine, los investigadores tuvieron en cuenta que el aceite de pescado se suele recomendar para evitar el desarrollo de enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, las evidencias sobre el grado de protección no eran concluyentes.
Se propusieron calcular la relación entre los suplementos de aceite de pescado y los nuevos casos del tipo de arritmia llamada fibrilación auricular, infarto de miocardio, ACV e insuficiencia cardiaca, y muerte por cualquier causa en personas sin enfermedades cardiovasculares conocidas.
Además, evaluaron el papel potencial de estos suplementos en el riesgo de pasar de una buena salud cardíaca a la fibrilación auricular, a episodios cardiovasculares graves, como un infarto, y a la muerte.
El estudio incluyó 415.737 participantes del Biobanco del Reino Unido (55% mujeres), con edades comprendidas entre los 40 y los 69 años. Fueron encuestados entre 2006 y 2010 para recopilar información básica. Se incluyó la ingesta habitual de pescado azul, pescado blanco y suplementos de aceite de pescado.