Otra queja que avala las agotadoras jornadas de los médicos residentes en los hospitales del país, ahora salida de una autoridad jerárquica en el tema gremial y académico.
El doctor Henry Mesa es el gerente de Enseñanza e Investigación de la maternidad Nuestra Señora de La Altagracia y presidente del Consejo Nacional de Sociedades Especializadas del Colegio Médico Dominicano. Es decir, dos condiciones de peso.
Resumen de Salud lo ha entrevistado como parte de una serie de entrevistas, reportajes e investigaciones sobre el tema de las residencias.
En síntesis, el doctor Mesa coincide con una verdad a voces altas: que los residentes trabajan mucho y tienen pocas condiciones. Y que esos médicos no encuentran trabajo fácil y tienen que concentrarse en las metrópolis.
Les dejamos la entrevista realizada por nuestros reporteros al doctor Mesa:
“En la maternidad Nuestra Señora de La Altagracia tenemos un programa que fue revisado y actualizado hace poco, este programa incluye temas muy completos en cuanto a la capacitación de los residentes para que salgan con las competencias necesarias
“Nuestro programa abarca todo lo que es el Plan de Competencias avalado por el Ministerio de Educación Superior Ciencias y Tecnología y la UASD.
“Como en todas las residencias, faltan cosas: poco espacio para los residentes, tenemos muchos residentes; además, por ser la maternidad el principal hospital de referencia nacional para casos complejos, tenemos residentes que rotan de otras escuelas.
“Son enviados aquí por el nivel del complejidad que puede manejar el médico especialista del hospital.
“Además, como a la residencia de anestesiología y de ginecología y obstétrica le aumentaron un año, eso implica que el número de residentes se incremente. Tenemos hasta once y nueve residentes por habitaciones.
“Hay que tomar en cuenta que hay una parte del hospital que está en remodelación aunque no afecta directamente.
“La gerencia del hospital va a cerrar la biblioteca en unas dos semanas para iniciar su remodelación, porque no está en condiciones adecuadas.
“Para nadie es un secreto que la residencia medica es un plan de estudio de cuatro años donde los médicos hacen guardias cada tres o cuatro días, según el programa y según lo amerite el caso y el tipo de residencias.
“En la maternidad (La Altagracia) muchas veces los residentes no pueden descansar por el volumen de los pacientes.
“Regularmente entran al hospital a las 7: 00 de la mañana, si están de guardia ese día. Las guardias se toman a las 4:00 de la tarde, pero ellos están trabajando desde las 7:00 de la mañana. A las 4.00 de la tarde toman la guardia e inmediatamente siguen hasta el otro día, hasta las 7:00 de la mañana y salen ese día a las 12:00 del mediodía; O sea, termina su jornada de trabaja a las 12:00 de la mañana del día siguiente.
“Muchas veces tienen que quedarse más tiempo porque tienen que egresar las pacientes, tomar las analíticas, revisar que la salud de la pacientes no esté comprometida, que si tienen una paciente complicada tienen que hacer hemogramas transfusiones; entonces, se van como cuatro a cinco de la tarde del día siguiente.
“En conclusión, es una jornada agotadora con un descanso deficiente, un área que tenemos que mejorar.
“Regularmente en el tiempo que se puede se le dan dos horas de descanso.
“En el hospital tenemos las residencias de anestesiología, perinatología, obstetricia y ginecología, oncología ginecológica, endocrinología ginecológica.
“Creo que se debe hacer una especie de promoción e inserción laboral, porque hay residencia que tienen más residentes de otros.
“Se podría decir que hay muchos ginecólogos o muchos pediatras, pero éstos son los especialistas que tienen más posibilidad de que sean contratados en los diversos programas.
“Ejemplo, en Jimaní o cualquier provincia lejana tú no encuentras un otorrinolaringólogo, por eso me parece que llegó el tiempo de formar los especialistas que la población necesite.
“Ejemplo, yo necesito formar 20 neurólogos y distribuirlo en toda la geografía nacional; pero esto se imposibilita muchas veces por las infraestructuras de los centros de salud del país. Hasta que las infraestructuras no se mejoren vamos a tener una deserción de esos médicos, porque el ginecólogo se va a cualquier provincia, pero los oftalmólogos, otorrinos y otros no; porque no tienen los centros lejanos los instrumentos que requieren para ejercer.
“Lo que se requiere es que tengamos buenas infraestructuras y equipos adecuados para trabajar.
“El Estado tiene la obligación ofertar al residente un sitio donde vaya a desarrollar su futura especialidad.
“Los profesionales quieren ofrecer sus servicios, pero para eso se requiere un lugar donde hacerlo.
“En el tema del código único se está trabajando en el proyecto porque tienen varios puntos que hay que definir porque la SISALRIL (Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales) es quien maneja ese tema.
“Se hicieron algunas correcciones al borrador porque entendemos que como sociedades médicas somos quienes debemos certificar quiénes pertenecen a la sociedad. No creo que otra persona pueda certificar más que las sociedades y el CMD”.
Por Gabriela Mora
