Santo Domingo. – El pasado proceso comicial del gremio médico dejó heridas profundas o quizás profundizó las ya abiertas. Por eso, los estertores aún se escuchan en el silencio preocupante de las armas.
El doctor Severo Mercedes, maestro de la Medicina Dominicana y pasado presidente del gremio, acusa una preocupación profunda, la misma que expresan los generales sitiados sin escapatoria ni brecha alguna para refuerzo nuevas tropas y suministros.
“Me siento un perseguido de Waldo (Suero, presidente del Colegio Médico Dominicano, CMD) y lo responsabilizo de lo que me pueda pasar”, expone, al llamar, preocupado, a nuestra Redacción.
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Severo , uno de los más visibles adversarios del cinco veces presidente del CMD, asegura que Suero le tiene bloqueado su trabajo como director del Consejo Nacional de Recertificación Médica), un órgano estatal y académico que certifica la actualización científica de los galenos.
Expresó que la junta directiva encabezada por el viejo gremialista tiene a 27 sociedades médicas en contra.
Precisó que la persecución que atribuye es consecuencia de la participación activa de la plancha perdedora en las elecciones del CMD del pasado mes de noviembre.
A la sazón, el también expresidente de la Sociedad Dominicana de Cirugía Plástica y jefe de la única escuela de esa especialidad en el país fue una de las zapatas que impulsó la candidatura de Yubelkis Aquino.
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Severe, quien se siente perseguido, indicó que, a pesar de que se convocó a un concurso público para la escogencia de un nuevo director ejecutivo en el CONAREM, el presidente del gremio no le suelta el guante.
“Hasta una goma (de su vehículo) que se me piche es responsabilidad suya”, exclamó.