Las técnicas tradicionales de bioimagen como la resonancia magnética, la tomografía computarizada y los rayos X son bien reconocidas, pero el uso de nanodispositivos está ganando terreno por su enfoque menos invasivo y su capacidad para ofrecer vistas detalladas del interior del tejido. Ahora, los investigadores están desarrollando un innovador nanodispositivo capaz de transformar la luz de baja energía en luz de alta energía en un amplio espectro.
Al mejorar las interacciones entre la luz y la materia a nanoescala, estos dispositivos demuestran una mayor versatilidad y sensibilidad a los eventos corporales que ocurren en la superficie del dispositivo en comparación con los que se utilizan actualmente en la industria médica.
Investigadores de Virginia Tech (Blacksburg, VA, EUA) han descubierto principios fundamentales en la mecánica cuántica que han llevado a un diseño innovador destinado a mejorar la eficacia de estos nanotransductores ópticos.
Este avance permitirá a los investigadores observar más de cerca la interfaz entre los sistemas biológicos y los nanodispositivos, incluidos los cambios de voltaje en las actividades cerebrales y las alteraciones en la concentración de biomoléculas.
Al transferir luz de alta energía desde luz de baja energía, los nanotransductores pueden capturar imágenes más claras, contribuyendo así a una mejor comprensión y diagnóstico de diversas enfermedades y afecciones. A pesar de su tamaño nanoscópico, este dispositivo fotónico de última generación tiene un enorme potencial para futuras aplicaciones.
“Esta nueva tecnología podría potencialmente hacer que la bioimagen sea más clara y permitir a los médicos detectar enfermedades antes. La detección temprana significa un tratamiento más temprano que es fundamental para muchas enfermedades terminales”, dijo Seied Ali Safiabadi Tali, ingeniero fotónico de Quantum-Si.