Santo Domingo.- A propósito de la revocación por parte de la Agencia de Medicamentos y Alimentación o Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos al uso de hidroxicloroquina en pacientes de coronavirus, por las consecuencias y riesgos de la molécula en otras patologías, la neumóloga Evangelina Soler, llamó la atención de las autoridades dominicanas.
Durante una entrevista con Resumen de Salud, la experta exhortó a las autoridades competentes para que regulen el uso de estas moléculas, tras afirmar que en el país muchos de sus colegas usaron la molécula sin mayores complicaciones.
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Sin embargó, destacó que también conoce del uso indiscriminado por parte de médicos sin la debida experiencia, lo que a su juicio debe llamar a la reflexión.
“Hay una cantidad de personas que están utilizando dicha medicación de forma ambulatoria sin una debida supervisión”.
Advirtió que hay que tomar muy en cuenta las acciones de la FDA ya que la misma advirtio acerca de los problemas cardiovasculares.
Recordó que el uso de sulfato de cloroquina y sulfato de hidroxicloroquina medicamento usado dentro del grupo de terapia de uso compasivo en los pacientes con enfermedad Sars-Covid-19.
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“Si bien es cierto que la hidroxicoroquina es una molécula que se ha venido usando desde hace décadas para el manejo de numerosas enfermedades reumatoides sin mayores complicaciones, también es cierto que su uso asociado a la Azitromicina potencializa el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares como arritmias y otras afecciones cardíacas”, adujo.
Agregó que a pesar del escándalo que se ha producido en los últimos días en torno a esta molécula y estudios científicos realizados con poco rigor se plantea situaciones que envuelven a esta molécula intereses farmacéuticos.
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“No es menos cierto que las evidencias recolectadas a lo largo de la pandemia ponen de manifiesto la gran cantidad de eventos cardíacos de importancia asociados a la combinación de la hidroxicloroquina o sulfato de clororquina asociado a la Azitromicina, donde los beneficios obtenidos para controlar la replicación del virus y retener la enfermedad han sido mayores los riesgos que los propios beneficios”.
