San José.- A pesar de que todos estamos expuestos al contagio del COVID-19 (Coronavirus), las personas más vulnerables son las que padecen enfermedades crónicas como sobrepeso, obesidad, diabetes e hipertensión. Esto se debe a que su sistema inmune está comprometido y no funciona correctamente ya que trata de solventar las deficiencias existentes, ocasionando un retraso en su periodo de reacción.
Por eso, el Colegio de Profesionales en Nutrición (CPN) advierte que ahora más que nunca es indispensable que la población se alimente de manera sana y equilibrada.
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El Dr. Stiff Masís, vicepresidente del CPN, explica que “si hay deficiencias en nutrientes en el cuerpo, se va a generar una carencia en los mecanismos de protección, de manera que la piel y las mucosas se pueden ver afectadas; por eso es importante que el sistema inmune trabaje de forma eficiente y adecuada y esto se da si la persona está bien nutrida”.
Existen nutrientes específicos que tienen un papel relevante dentro del sistema immune y que son esenciales en personas que padecen enfermedades crónicas. La combinación periódica de estos nutrientes hace que el sistema inmune esté fortalecido y listo para cualquier eventualidad:
Nutriente Aporte al organismo ¿Dónde se puede encontrar?
Vitamina A: Necesaria para la formación de anticuerpos e interviene en el mantenimiento de la piel, ojos, sistema digestivo y genitourinario. Zanahoria, espinaca, chile dulce, el perejil, huevos y papaya.
Vitamina D: Regula la función inmunitaria por su papel en la producción de proteínas antibacterianas. Pescados grasos como salmón y atún, hígado vacuno, queso y yema de huevo.
Vitamina E: Su función específica es incrementar la actividad de los linfocitos T, protegiendo las membranas celulares, además tiene función antioxidante. Aceites como el de girasol y el de soya, en el maní, el maíz, el germen de trigo.
Vitamina C Antioxidante. Regula la respuesta inmunitaria y estimula las funciones de los leucocitos. Perejil, chile dulce, brócoli, kiwi, papaya, fresas, limón (se recomienda no consumir estos alimentos cocinados para no alterar su aporte).
Cobre: Es un mineral implicado en la respuesta inmune innata. Legumbres, los cereales integrales, el cacao, las nueces, las pasas, las ciruelas pasas, el sésamo, los pistachos.
Selenio: Tiene funciones antioxidantes y contribuye a la función inmunitaria, pero en exceso puede tener un efecto pro-inflamatorio, por lo que en caso de suplementación se debe modular correctamente la dosis. Se encuentra de forma natural en las nueces de Brasil, los cereales integrales, mariscos y pescados.
Hierro: Participa en la producción de linfocitos T y forma parte de enzimas antioxidantes, pero también genera especies reactivas de oxígeno que participan en la oxidación. Carnes y vegetales de color verde oscuro como la espinaca y otras legumbres, frijoles y sésamo
Zinc Se ha utilizado a nivel pediátrico en infecciones respiratorias y para la recuperación del sistema inmune en casos de desnutrición. Sésamo, germen de trigo, queso, carnes, legumbre
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El Dr. Masís reitera que “la mala selección de comidas altas en azúcar, sal y grasa hacen que el sistema inmunológico se encuentre sin las herramientas importantes para protegernos. El estilo de vida poco saludable coloca al organismo en una posición vulnerable. En la prevención está la cura”.
Cuidado con una inadecuada o excesiva suplementación
Una reacción de pánico que se ha presentado en otros países, además de la compra de alcohol en gel y mascarillas, es que las personas tienden a tomar suplementos de manera excesiva e inadecuada.
“La suplementación de vitamina C no es la única vía correcta para fortalecer el sistema inmunológico ni mucho menos invertir dinero en batidos ni polvos extraños que pretenden confundir y hacer creer que es la mejor opción. Desde el Colegio incentivamos a consumir alimentos que proporcionen todos los nutrientes anteriormente mencionados de la manera más sencilla pero de forma regular”, agrega el representante del CPN.
No se puede bajar la guardia ante esta situación mundial y mucho menos en el aspecto nutricional. Se debe vigilar la alimentación de niños, adultos mayores y personas enfermas. Llevar al pie de la letra las recomendaciones emitidas por el Ministerio de Salud como el correcto lavado de manos y mejorar desde ya la alimentación.
Fuente: A diario.com
