Hay luz: Ginecología trabaja con autoridades a favor de embarazadas

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Santo Domingo.- Hay luz: Ginecología trabaja con autoridades a favor de embarazadas. La Sociedad Dominicana de Obstetricia y Ginecología y las autoridades de salud  no se han quedado de brazos cruzados con la situación de los embarazos en el país.

En ese sentido, han unido sus manos en una serie de acciones para prevenir muertes y mejorar la calidad del proceso de gestación.

El doctor César López, presidente de la Sociedad, informó a Resumen de Salud de varias acciones que desarrollarán.

«Con el apoyo del Ministerio (de Salud Pública), estamos preparando un taller para residentes de tercer y cuarto año sobre atención de medicina crítica obstétrica y éste se iniciará en el mes de noviembre.

Agregó que con el SNS, «estamos trabajando la parte de mejoría y capacitación a los médicos de atención primaria y talleres en prevención de hemorragia de post parto y diagnóstico oportuno y manejo de Trastorno Hipertensivo Gestacional».

«Estamos comprometidos junto a ellos a mejorar este sistema de salud que hoy vivimos. Es tiempo de esperar acciones que ya se encaminan a ser tomadas porque están ya canalizadas», comentó el doctor López.

Y agregó «démosle la oportunidad de accionar. Esto es compromiso de todos, Ministerio de Salud, SNS, sociedades especializadas, Pediatría, Perinatologia y Obstetricia y de manera especial el Colegio Médico Dominicano».

A continuación, les dejamos el texto de un reportaje publicado por nuestro medio, al conmemorarse, el 31 del mes pasado, el Día Internacional del Obstetricia y la Embarazada:

La gestación considerada como una de las etapas más hermosas en la vida de una mujer, también puede llegar a ser tan complicada al extremo de poner en riesgo su seguridad y su vida.

Esto especialmente en países como República Dominicana, donde se carece de programas de prevención del embarazo, seguimiento, asistencia en salud y orientaciones adecuadas que respalden a las futuras madres y garanticen un proceso seguro y genuino.

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A propósito de la celebración este martes, como cada 31 de agosto, del Día Internacional del Obstetricia y la Embarazada, y a pesar de que al año pasado se avanzó en la reducción en un “30 por ciento” de la mortalidad materna, es largo el camino que queda por recorrer, especialmente, porque en este año se presentó un revés, que muchos atribuyen a la  pandemia por Covid-19.

Esta celebración busca hacer énfasis en la mortalidad materna, que según las estadísticas globales, cada año mueren aproximadamente 10 millones de mujeres debido a lesiones, infecciones o enfermedades durante el embarazo, parto o posparto.

En República Dominicana, de acuerdo con el boletín epidemiológico número 12, del 19 de junio del 2021 de la Dirección General de Epidemiología, hasta el 19 de junio habían 113 muertes maternas. El año pasado para la misma fecha habían fallecido 90 mujeres en el parto o posterior a él.

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La mortalidad infantil también se elevó en un 118 por ciento, implica que fallecieron 1,325 menores. El 80 por ciento de esas defunciones corresponde a la etapa entre cero a 28 días. De acuerdo con las autoridades del Ministerio de Salud, para el año 2020, habían fallecido 1,122 menores.

Las complicaciones del embarazo y el parto son la principal causa de mortalidad entre las mujeres entre las edades de 15 y 19 en dichas zonas.

Estos datos evidencian que la vida de las mujeres en países como República Dominicana se complica cuando enfrenta un embarazo, porque sus posibilidades de morir aumentan cuando está embarazada, afirmó el doctor César López, presidente de la Sociedad Dominicana de Obstetricia y Ginecología.

Destacó que, el embarazo, especialmente si no es planificado, aumenta las posibilidades de complicarse, ya que habrá más angustia, ansiedad, tensión y menor preparación adecuada previa.

Agregó que esto se debe a que “República Dominicana carece de promoción en salud para mujeres en estado de embarazo, pese a que es bien sabido que la mujer necesita mucha orientación sobre el compromiso con la sociedad, con ella misma, con su familia y demás”.

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Dijo que el Estado debe garantizar mejores condiciones alimentarias, orientar sobre nutrición, implementar campañas nacionales para enseñar a comer a adolescentes y a las mujeres embarazadas.

“La mujer tiene que cambiar su alimentación por una dieta adecuada y balanceada, olvidar los hidratos de carbono simple y sustituirlos por fibras y proteínas, mayor consumo de agua, vegetales, descanso, reposo, buenas horas de sueño”.

Enfatizó en el consumo de agua para garantizar la producción del líquido amitótico, “medio de sostén del bebé para alimentarse y protegerse dentro del vientre”.

Expresó que desde la adolescencia se debe saber que ciertos aspectos nutricionales y del cuidado de su salud impactarán en la evolución de su futuro embarazo, en el desarrollo intraútero de su bebé y en el desarrollo de su hijo después del nacimiento.

“Es de suma importancia que la mujer se trate con un médico y programe su embarazo para preparar su cuerpo y mente para ser madre, pero en República Dominicana, apenas 2 al 4 por ciento lo hace. El 60 por ciento de los embarazos son no planificados, se producen cuando una pareja, queda embarazada, sin buscarlo, pero salió pasó y se enfrentó”. “No deseado es donde se tiene un novio, amigo o pareja, no anda buscando embarazo, pero tampoco usa método y sale embarazada”.

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En tal sentido, el experto con amplia experiencia en partos complicados, destacó la importancia de la anticoncepción o planificación familiar, la que consideró parte importante de la cultura que hay que poner a la mujer en su cabeza.

En cuanto a las complicaciones, entre las que citó como las más peligrosas por su impacto en la mortalidad: anemia, hipertensión, hemorragia, infecciones y otras.

En tal sentido, recomendó programas nacionales de prevención a la anemia. “Que a toda mujer embaraza se le dé en todas las consultas prenatales en los centros hospitalarios o en las unidades de atención primaria hierro”.

Asimismo, ponderó la necesidad de que los médicos de las unidades de atención primaria sean capacitados y entrenados en trastornos en embarazos, “porque son médicos de familia y generales, ya que son los que ven a las embarazadas hasta las 36 semanas de gestación”.

Consideró que esta intervención será determinante para reducir la mortalidad y otras complicaciones del embarazo, porque la mayoría de las enfermedades se producen entre la semana 32 y 36.

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“De 32 a 36 semanas es la época donde aparecen la mayoría de las complicaciones empezando incluso las cardíacas que son las que complican mujeres y los trastornos hipertensivos que van a aparecer a partir de la 20 semana. Mientras esa mujer tiene esa edad gestacional esta viéndose en un subcentro o unidad de atención primaria y ahí lo que hay son médicos de familia y médicos generales”.

La obstetricia al igual que otras especialidades avanza más, no solo en el diagnóstico, sino los cuidados, las atenciones durante los meses de gestación, los estudios y pruebas a realizar para tener una mayor certeza de cómo va todo lo relacionado al proceso.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el embarazo como el proceso que comienza cuando se adhiere el blastocito a la pared del útero (unos 5 o 6 días después de la fecundación, entonces este, atraviesa el endometrio e invade el estroma.

A propósito de la fecha, la Sociedad reafirma su compromiso de que pese a todas las circunstancias que le rodean a la mujer, sin importar su condición de gestante, se mantiene activa, cada día con más funciones.

El Día de la Obstetricia y de la embarazada, se celebra en honor al día en que murió San Ramón Nonato en el año 1240. Este Cardenal nacido en Lérida en el año 1204 fue extraído con vida del vientre de su madre muerta el día anterior.

Por Gabriela Mora

resumendesalud@gmail.com