El Estado debe reasumir su papel de garante de la salud de los dominicanos, lo que se lograría con la integración de sus administradoras de Riesgo de Salud (ARS) públicas y mixtas, para que exista un solo sistema de afiliación, que se desaparezca la figura del Régimen Contributivo Subsidiado, segregando sus componentes subsidiado y contributivo a cada regímenes en particular, que sí existen.
Esa es la apreciación que en sentido general tiene el doctor Bernardo Defilló, ex titular de la Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales (Silsaril), y que comparte con los lectores de DL en esta entrevista.
P. ¿Cuál es su evaluación del Sistema Dominicano de Seguridad Social?
R. A esta fecha de 2014 tiene sus luces y sombras. Entre las cosas positivas está que se ha establecido un sistema para asegurar las condiciones de salud y el control de las enfermedades que afectan a los dominicanos como personas y de grupo familiar, dejando para el Ministerio de Salud Pública el control de las enfermedades en la comunidad y las epidemias.
Entre lo negativo está la asignación arbitraria de recursos por vía de la cápita para el Régimen Contributivo y de sólo la mitad para el Subsidiado, así como sustituir el llamado Plan de Servicios de Salud (PDSS), obligando a los afiliados a adquirir planes complementarios.
P. ¿Cuál es su opinión sobre las instituciones que manejan el sistema?
R. Pobre. Sus gestiones deben ser enriquecidas, mejorar sus objetivos y estrategias, considerando de manera prioritaria las condiciones humana y familiar, antes que la económica, aunque ambas deben ser proporcionales.
P. Si tuviera la oportunidad de hacer cambios en la ley, ¿qué puntos tocaría?
R. Las enfermedades catastróficas o de alto costo. Éstas deben gozar de una cobertura total. Se debe revisar y procurar los proyectos que, a través, de las agencias internacionales, ofrecen recursos económicos. El Estado debe declarar de utilidad pública los medicamentos de todas las enfermedades crónicas.
P. ¿Y qué de la cobertura de medicamentos?
R. El monto debe ser aumentado, y para eso se debe modificar la ley, porque enfermedades comunes se convierten en catastróficas, porque el paciente no tiene los recursos para detener la enfermedad. Además, 3 mil pesos se consumen en un solo medicamento.
El Estado debe procurar una cobertura privilegiada para los subsidiados.
P. Se dice que el hecho de no iniciar la SS por el primer nivel le ha salido caro al país. ¿Cree usted igual?
R. Es un disparate hablar de que la atención primaria es un grupo de clínicas o edificios. Esto es una estrategia que se supone comprende el primer nivel de atención en la comunidad, e incluye prevención de enfermedades hereditarias y prevenibles, así como vacunación.
Fuente: www.diariolibre.com