Santo Domingo.- En República Dominicana un promedio 0.7% al uno por ciento de la población tiene psoriasis, aunque actualmente no se tiene una cifra específica, aseguró la doctora Solange Reynoso, médica dermatóloga.
En entrevista a nuestro medio, puntualizó que prontamente se tiene pautado hacer un levantamiento de datos y estadísticas sobre las cifras de personas exactas con esta enfermedad.
¿Cuáles son las principales enfermedades dermatológicas que afectan a los dominicanos?
Las principales enfermedades dermatológicas son las infecciosas. Las más comunes son por hongos, virus y bacterias, pero no podemos obviar las enfermedades que tienen más impacto en la calidad de vida de los pacientes, como las patologías inmunomediadas o inflamatorias que también son muy importantes.
Una de esas condiciones es la psoriasis, una enfermedad inflamatoria crónica que se manifiesta en la piel, pero no solamente se ve ahí. La piel es la punta del iceberg, la parte más externa, donde se evidencia clásicamente por unas placas rojas, gruesas con escamas, principalmente en las zonas de resalte como los codos, las rodillas, por encima de los huesos o el cuero cabelludo, pero también afecta otros órganos y sistemas. Una de las cosas más comunes es la artritis, y puede afectar otros sistemas como la parte vascular, metabólica, entre otros.
¿Cuáles son las novedades que hay en tratamientos, procedimientos, equipos, medicamentos para psoriasis?
La psoriasis es una enfermedad que afecta mucho la piel; los pacientes tienen un aspecto muy evidente con muchas lesiones. Aparte, también pueden desarrollar artritis y otras comorbilidades que impiden que las personas realicen sus actividades. Por tanto, es una enfermedad que impacta su calidad de vida. Cuando el paciente recibe un tratamiento oportuno, en el momento apropiado, mejora su capacidad de inserción laboral, su vida social, emocional y mejora el aspecto de su piel y su funcionabilidad. Que los pacientes sean tratados de forma oportuna impacta de manera importante su vida, pero también su entorno laboral, familiar y profesional.
Por mucho tiempo, cuando se pensaba que la psoriasis era una enfermedad de piel, nos limitábamos solamente a aplicar cremas o tratamientos tópicos. Ahora que entendemos que la psoriasis es una enfermedad multisistémica y que la piel es solamente un componente, entendemos que el tratamiento debe ser sistémico. Ya hay muchas innovaciones.
En República Dominicana, somos afortunados porque tenemos terapias innovadoras que son básicamente medicamentos bilógicos. Esos medicamentos existen y están disponibles en el país a través del programa de alto costo. Sin embargo, que estén disponibles no siempre quiere decir que estén a la mano de todos los pacientes, porque hay un tema de acceso.
Brindarnos cualquier dato o detalle que considere relevante sobre psoriasis en República Dominicana.
En primer lugar, algo que yo siempre procuro resaltar es que la psoriasis es una enfermedad que no es infecciosa. No es necesario rechazar o apartarnos del paciente. Lo segundo es que es una enfermedad sistémica, que no se limita solamente a la piel; por tanto, no podemos pretender resolverlo solamente con cremas, sino que hay que hacer un tratamiento integral, ver al paciente de manera sistémica y tratarlo de esa manera. En tercer lugar, debemos procurar que el paciente pueda acceder a las terapias apropiadas en el momento indicado, porque eso va a impactar no solamente la piel, sino el entorno del paciente.
Algo que debemos trabajar, que es una gran meta que tenemos, es hacer un levantamiento apropiado de datos y cifras, que entiendo, pronto vamos a trabajar en eso. A hoy, no tenemos datos específicos. El promedio de la zona es aproximadamente entre el 0.7% y el 1% de población tiene psoriasis; no debemos estar lejos de ahí. Aunque puede sonar poco, el impacto en la vida de los pacientes es muy alto. Definitivamente, ese porcentaje requiere la atención necesaria.
¿Cuál es a la que más usted le presta atención?
En dermatología, yo soy una abanderada de las enfermedades inflamatorias crónicas, precisamente por el impacto que causan en los pacientes, porque no solamente impactan la piel, sino todo su sistema.
A la par de la psoriasis, también soy una abanderada de otras enfermedades como la dermatitis atópica y la hidradenitis supurativa que afectan la piel y otros sistemas del paciente, influyendo en su calidad de vida. Entonces, esas enfermedades que tienen un componente sistémico deben ser tomadas en cuenta.