S
anto Domingo. – El tema de la salud mental sigue motivando a más de uno a levantar su voz para que los tomadores de decisiones lo pongan en su agenda, convencidos de que es uno de los más serios problemas sanitarios.
El psiquiatra Ángel Almánzar es uno de ellos y quien afirma que la situación de la salud mental en el país ha sido crónicamente mala, porque lo dejan fuera de las políticas públicas priorizadas en función de los gobiernos.
“Para que salud mental pueda avanzar debe haber una voluntad política determinante. Se hizo un esfuerzo serio, profundo del 2015-2020”, dijo, antes de agregar que la problemática sigue latente.
Le puede interesar:
Trastornos de salud mental, un riesgo global
Entrevistado por Resumen de Salud, el psiquiatra citó el caso específico de los menores de edad con trastornos mentales, lo que los especialistas denominan infantojuveniles, porque se visibilizan menos los adolescentes que tiene problemas emocionales, no les prestan atención y trae como consecuencia adultos enfermos.
Hay una continuidad biológica y los problemas que se presentan en algún momento de la vida va a seguir presentándolo, pues es un problema de salud, en este caso, mental, igual que otra condición sanitaria.
Es decir, – dice el doctor Almánzar-, si un niño se fractura un hueso y no recibe la debida atención del médico especialista, va a tener consecuencias que le afectará siempre, lo mismo sucede con los trastornos mentales.
“El niño, el adolescente, el joven que tiene un problema de salud mental y no se le resuelve o se resuelve mal, esa dolencia lo va a acompañar en su cerebro en la adultez”, precisó.
El especialista dijo que son tres las condicionantes determinante para presentar un problema de salud mental: lo biológico, lo psicológico y lo social o ambiente social.
Una manera de detectar que un niño o un adolescente está presentando trastornos de su salud mental es en el entorno familiar y el escolar y se puede manifestar por baja calificaciones o que no es productivo.
Le puede interesar:
Violencia en RD genera efectos en la salud mental
Si en la casa, de pronto cambia su forma de ser, de comunicarse con lo demás, es un motivo de alarma.
“Hay muchas señales que dan los niños y los adolescentes que indican que algo no anda bien y se deben atender hasta determinar si hay una condición de salud mental o si es un cambio típico de a edad”, apuntó.
Leyes y cobertura
Recordó que en el Congreso hay un proyecto de ley del diputado Aníbal Díaz, que estima muy interesante y que entiende es un esfuerzo loable, que todos los sectores deben apoyar y empujar para que se convierta en ley.
“Falta mucho apoyo a la salud mental. Debe de haber voluntad política expresada en apoyo económico, en inversión”, insiste el psiquiatra.
En ese orden, aboga para que se implemente el Plan Nacional de Salud Mental y que se les otorguen los fondos para costear a nivel público todos los procesos que se requiere para que la población tenga una atención adecuada.
Debido a que la salud mental está fuera del catálogo de prestaciones del Plan Básico de Salud (PBS), Almánzar plantea la necesidad de que se incluya para las Administradoras de Riesgo de Salud (ARS) asuman responsabilidades con relación a la salud mental.
El doctor Almánzar hizo referencia también al proyecto del senador de San Pedro de Macorís, Franklin Peña Villalona, que busca rehacer la Ley de Salud Mental, para adecuarla a los nuevos tiempos y crear los reglamentos para que se pueda ejecutar.
Asegura que esa nueva ley sería la que vendría a revolucionar la salud mental que requiere el país.
