Les dejamos un artículo sobre el tea de Dashira Martínez, codificadora médica certificada por la Academia Americana de Codificadores Profesionales AAPC y posee una titulación académica en Codificación, Auditoría y Facturación Médica. Dirige la Unidad de Codificación Médica del Hospital General de la Plaza de la Salud:
Son poco conocidos, pero muy necesarios en el sistema de salud internacional, nos referimos a los códigos CPT que se traducen del inglés como terminología de procedimientos actuales. Estos códigos representan en definitiva el servicio médico que recibió el paciente en un centro de salud con todos los detalles.
Este sistema de codificación fue desarrollado y publicado por la Asociación Médica Estadounidense AMA en 1966 y ha sufrido varias transformaciones a lo largo de los años. Actualmente tiene cinco dígitos y es la forma más reconocida a nivel mundial para seguros de salud públicos y privados.
Los proveedores de atención en salud y compañías de seguros usan los CPT para simplificar el proceso de reclamación y para lograr que exista uniformidad en el sistema de salud.
Por ejemplo, después de una visita a un centro de salud para un examen físico, se recibe una hoja con el resumen de su atención; el centro médico le facturará con una columna de códigos CPT, estos determinarán cuanto pagará usted y cuando pagará su compañía aseguradora.
Si se le realiza una resonancia magnética cerebral que incluye un método de contraste se utiliza el código 70558, sin embargo si no tiene contraste se califica con el 70559 y ambos códigos tienen diferentes costos.
División por categorías
Se dividen en categorías I, II y III. La primera abarca los procedimientos más comunes cuyos resultados han sido probados y documentados por la FDA, agencia reguladora de alimentos y drogas en los Estados Unidos; la segunda categoría miden la calidad de los procedimientos médicos y en vez de tener cinco dígitos, tienen cuatro seguido por la letra F. Aquí encontramos historial del paciente, examen físico y seguridad del paciente.
En la categoría II encontramos las tecnologías nuevas y emergentes, es decir procedimientos que no han sido aprobados por la FDA, pero son asignados de manera temporal hasta que obtienen sus aprobaciones, de lo contrario son eliminados si no lo logran en cinco años.
Los CPT tienen 6 secciones: evaluación y manejo, anestesia, cirugía, radiología, patología y laboratorio y por último medicina. Estos a su vez tienen modificadores, los cuales nos sirven para modificar o documentar el servicio ofrecido, por ejemplo si el procedimiento lo hicieron más de dos médicos, si había una enfermera; si los servicios fueron realizados más de una vez. Cada uno tiene un costo diferente. En anestesia se utilizan con frecuencia para determinar si se aplica en un paciente normal saludable, con desorden sistémico leve, entre otras clasificaciones.
El rol de los CPT con los seguros médicos
Las facturaciones, reclamaciones y seguimientos se realizan de manera electrónica en la mayoría de los países, lo que facilita el flujo de la información médica. Los códigos CIE-10 y CPT son necesarios en las facturas, uno debe ir en consonancia con el otro; un diagnóstico se relaciona con uno o varios procedimientos médicos y los sistemas automatizados detectan cuando no hay relación, sin embargo es el codificador profesional certificado quien revisa minuciosamente cada relación entre códigos y se asegura que la información final sea la correcta.
En los últimos años muchas aseguradoras internacionales que envían sus pacientes a centros médicos u hospitales dominicanos, requieren el uso de los CPT para sus facturas, de esta manera garantizan transparencia y uniformidad en el resumen de servicios de sus afiliados. La última versión de los CPT para el 2018 ya se encuentra disponible de manera electrónica y física con una licencia obligatoria para su uso.
Para poder codificar correctamente, se requiere tener en el equipo un codificador médico certificado, el cual recibe una preparación académica de alrededor de varios años, que comprende terminología médica, anatomía, facturación internacional y un riguroso examen que lo avala para realizar la labor a nivel internacional.
Por Dashira Martínez
MBA, CPC, MTMP
La autora es Codificadora Médica Certificada por la Academia Americana de Codificadores Profesionales AAPC y posee una titulación académica en Codificación, Auditoría y facturación Médica.
Dirige la Unidad de Codificación Médica del Hospital General de la Plaza de la Salud.