Santo Domingo.- La retirada inmediata del Proyecto de Ley De Modernización Fiscal, anunciada en días recientes por el gobierno dominicano, que en lo adelante constituye un giro en el estado de los hechos, en materia económica para el país.
INCÓGNITAS se dejan también en varios puntos para los médicos y profesionales de la salud, conociendo los cambios más relevantes en las áreas de la medicina abarcaban: desde exoneración de anticipos hasta un incremento del Impuesto Sobre la Renta para los profesionales que percibían ingresos más altos.
Por lo tanto, con la retirada de la Reforma, el sector médico tiene la incertidumbre ahora mismo, la suspicacia de ¿qué viene ahora? y ¿qué depara el futuro para la República Dominicana? con la retirada del Proyecto de Ley de Modernización Fiscal.
Otra interrogante concreta es ¿un futuro con una posible Reforma sin fecha clara? ¿cuáles son los pasos que deben seguir los médicos en lo adelante.
Para un escenario cargado de incógnitas sin respuestas inmediatas para el sector salud.
¿Cuál era el objetivo del proyecto de Ley de Modernización Fiscal?
El objetivo del proyecto de Ley consistía en modernizar el sistema tributario.
Esto abarcaba la exención de pago de anticipos de Impuesto Sobre la Renta para personas físicas, tales como médicos o profesionales de la salud, así como nicroempresas con la exención del 100% del pago de anticipos de ISR, pequeñas empresas que se les calcularía el 40% de los ingresos del periodo, medianas empresas que se les calcularía el 60% de los ingresos del período y para las grandes empresas que seguirían con el mismo esquema para determinar el ISR que pagarán el 100% del anticipo como se calcula actualmente.
A la vez, la exención era una especie de bienestar para estos grupos, porque la Ley ayudaría a sescargar la presión del flujo de caja con el tema del anticipo.
Posteriormente, con la retirada del Proyecto de Ley estos grupos deberán seguir pagando impuestos por adelantado generando probablemente tensiones en cuanto a la salud financiera de estos.
En otros términos, la Modernización Fiscal fue muy prometedora por el bien de aumentar el fondo para optimización de programas públicos, ejecutar varios proyectos de construcción y mejorar la calidad de los servicios públicos, con la base de cambiar la estructura de impuestos actuales.
Si bien fue considerada como algo justo para afectar la equidad de los impuestos, fue repentino como impactaría a los profesionales liberales y trabajadores como los médicos por la carga que conllevaba en cuanto al aumento de tasa del Impuesto Sobre la Renta para los profesionales que perciben ingresos por encima de 2,4 millones de pesos anuales, así como cambios en un grupo de exenciones actuales.
Además, afectaba a los consumidores finales de bienes y servicios que los impactaba de forma directa.
Fuera del tapete quedó el Proyecto de Ley, los médicos volverán a sus habituales formas de manejar sus impuestos.
¿Qué viene ahora?
Lo que sucede inmediatamente es que, con la retirada de del Proyecto de Ley de Modernización Fiscal, que supone un alivio, pero se deja un mensaje abierto sobre cómo otras reformas pueden ocurrir en el futuro y cómo pueden afectar a la profesión de los trabajadores sanitarios.
Antes de proponer otra reforma fiscal, sería necesario pensar en los componentes que afectan a los diferentes sectores económicos del país para que no solo sea efectiva para las finanzas públicas, sino también equitativa para todos los profesionales liberales como lo son los profesionales de la salud, siendo una base de la economía y el desarrollo del país.
¿Qué depara el futuro para la República Dominicana?
Con la retirada de del Proyecto de Ley de Modernización Fiscal, el país se encuentra en una situación de incertidumbre económica, no solo en lo que respecta las posiciones de los trabajadores sanitarios, sino a la economía en general.
La ley iba a ser una garantía para la sostenibilidad fiscal y, aunque la Ley proponía mayor equidad fiscal, en este sentido, para muchos era algo justo y para otros viéndolo desde afuera, como algo necesario para mejor distribución de las cargas fiscales.
Sin esta reforma, el gobierno carece de la capacidad de financiar servicios públicos mejorados, como la salud y la educación.
También se espera que el déficit fiscal del gobierno continúe creciendo, obligando al gobierno a depender de su deuda cada vez con más frecuencia.
A largo plazo, esta dependencia limitará la capacidad del Estado para inversiones en infraestructuras y servicios de gran valor y calidad.
¿Un futuro con una posible Reforma sin fecha clara?
Futuro sin fecha clara. La retirada de la Ley nos ha dejado con un vacío que, aunque debíamos esperar, nos deja inciertos sobre si será posible reiniciar o continuar con el proceso de modernización a futuro del sistema tributario dominicano.
A pesar de que se conecta con términos políticos, es claramente un tema que sin una fecha fija es difícil abordar. Podrá sesgarse o no, pero con esto, la retirada del Proyecto de Ley dejó este vacío, antes permanecerá perseguida por la duda.
¿Existe la posibilidad de que surja una propuesta viable en el futuro?
Es posible que el gobierno opte por una estrategia más inclusiva y participativa, con los sectores afectados, como por ejemplo los médicos y otros profesionales independientes.
Probablemente si se logra una comunicación más asertiva podría resultar una reforma más equilibrada y aprobada por varios sectores, para que se logre modernizar el sistema tributario sin que esto conlleve un rechazo generalizado como sucedió con el nombrado Proyecto de Ley de Modernización Fiscal.
Tal como indicó el presidente Luis Abinader en su discurso por la retirada del Proyecto de Ley de Modernización Fiscal: “No recibió el apoyo ciudadano”, “Nuestra democracia debe ser un diálogo constante”.
¿Cuáles son los pasos que deben seguir los médicos en lo adelante?
Aprovechar la retirada del Proyecto de Ley de Modernización Fiscal puede ser una oportunidad para optimizar la carga fiscal con anticipación, aprovechando que se está acabando el año fiscal 2024, para las personas físicas las cuales cierran sus operaciones al 31 de diciembre 2024.
Optimizando la situación fiscal, se encontrarán oportunidades tras la retirada de la eeforma, empezando por revisar la planificación fiscal y financiera individualizada.
Aprovechando las deducciones y algunos beneficios que se obtiene al estar inscrito en el régimen conveniente donde encajan los profesionales de la salud, a fin de reducir la carga impositiva.
Contar con asesoría adecuada, y mantenerse informados, debido a la complejidad del marco fiscal actual, a fin de tomar decisiones salomónicas que lograra la estabilidad en el largo plazo, así como prepararse para inminentes reformas que puedan impactar en sus operaciones y finanzas individuales.
Por Maria Yolanda Reynoso