Costa Rica tendrá un aumento en la cantidad de casos recuperados durante los próximos días, aseguró el ministro de Salud interino, Pedro González. Esto debido a que la institución buscará acortar los rezagos en el reporte de este dato.
“Es posible que en las próximas semanas y en los próximos días vean un aumento importante en los recuperados pero se debe a los esfuerzos que se están haciendo para poder ponernos al día con la información”, dijo González este 18 de agosto en conferencia de prensa.
Desde el mes de julio, las autoridades del Ministerio de Salud reportaron un rezago en el reporte de personas recuperadas. Es decir, los casos son tantos que muchos recuperados no se pueden incluir en la estadística oficial.
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Hasta un 40 por ciento de los recuperados no se han contabilizado dentro de la estadística, según dijo Gonzáez, particularmente en las regiones Central Sur y Central Norte del Ministerio de Salud.
Estas abarcan las poblaciones urbanas de San José, Heredia y Alajuela y están colapsadas por la cantidad de casos bajo seguimiento. Estas áreas también tienen atrasos para entregar órdenes sanitarias.
“Se trabaja con las regiones para ponernos al día. La información es totalmente transparente. Pasa por muchas manos de técnicos que verifican la calidad y están pendientes de que los datos sean fidedignos”, dijo González.
Antes, para definir a una persona como recuperada, se debía dar negativo en una prueba diagnóstica de covid-19. No obstante, cuando subieron los casos y se tuvo que ahorrar pruebas, se cambió el lineamiento para dar de alta a las personas que cumplieran un plazo de 14 días en cuarentena.
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La población recuperada de covid-19 es uno de los factores tomados en cuenta a la hora de declarar un cantón en alerta naranja, pero no es el único. También se toman en cuenta las tasa de ataque (presencia del virus en el cantón), la velocidad en el crecimiento de los casos y las condiciones poblacionales de cada cantón.
El coordinador de la maestría en Epidemiología de la Universidad Nacional, Juan José Romero, explicó desde principios de julio que el impacto de la pandemia ya no se podía ver con los casos activos, sino que se debía medir con hospitalizaciones y muertes.
“La tasa de contagio nos dice cuán rápido se transmite la enfermedad, pero no nos dice qué tan grave es la enfermedad. La gravedad está en el impacto y eso lo medimos en enfermos, hospitalizados y en muertos, en ese orden. No todos los infectados se enferman. No todos los hospitalizados se mueren. Podríamos tener muchos infectados y nada pasa, como también podríamos tener pocos infectados y muchas muertes”, dijo.