La Sociedad Dominicana de Pediatría aseguró que la República Dominicana exhibe una alta mortalidad materna, neonatal e infantil no acorde con el crecimiento económico sostenido en los últimos 10 años.
Se basa en las últimas tres encuestas demográficas y de salud que se realizan cada cinco años y que han señalado la alta mortalidad que requiere de algo extraordinario para disminuirlo.
Afirmó que es alarmante el alto número de embarazos en las adolescentes y la baja tasa de lactancia materna exclusiva que amerita corrección inmediata ya que esta práctica afecta la salud del producto en desarrollo.
Otro problema que necesita un ataque real es la drogadicción en adolescentes, la alta tasa de deserción escolar y la ausencia de programas de ayuda al adolescente.
Asi mismo añade que el maltrato infantil va en aumento, los hogares monoparentales proliferan en la clandestinidad y no hay una acción jurídica que regule esta figura familiar, que existe y necesita atención para proteger a esos niños, niñas y adolescentes en formación.
Además, dice que el país exhibe una inversión en salud de 1,4 % del PIB baja en contraste con países del área, con iguales condiciones económicas como el nuestro, que invierten 6 y 7 % de su PIB y este es un factor influyente en los programas de prevención no resueltos.
El objetivo final de este congreso es que se declare definitivamente como prioridad nacional el Binomio Madre-Hijo y la reducción significativa de la mortalidad materna infantil.
Las posiciones están contenidas en la declaración final del XLIV Congreso Nacional de Pediatría, celebrado en Punta Cana.