Merck,
una empresa de ciencia y tecnología, lanzó una tecnología de edición de genes pionera en su clase para modificar las líneas de células CHO de modo que sean resistentes al virus diminuto de ratones (MVM), una amenaza de contaminación muy común que persiste a pesar de la mudanza a procesos de fabricación químicamente definidos y libres de componentes animales. Las células CHO se utilizan comúnmente en la fabricación de productos biológicos.
La nueva tecnología Centinel de Merck apunta a los genes que juegan un rol en la susceptibilidad al MVM. De acuerdo a informes elaborados por el sector, las contaminaciones virales como la del MVM pueden tener importantes consecuencias para los fabricantes biofarmacéuticos y costar cientos de millones de dólares.
El mayor impacto de tal contaminación se da en los pacientes, ya que se puede poner en peligro el acceso a las terapias.
La tecnología Centinel™ proporciona a los fabricantes una vía adicional para mitigar el riesgo de la contaminación por MVM, a la vez que mantiene un nivel de calidad de proteína y una productividad equivalente en la línea celular.
