Santo Domingo.- Las innovaciones terapéuticas en el manejo de cáncer de mama y otros han demostrado que los tratamientos clásicos (quimioterapia, cirugías, radioterapias, hormonoterapias y otros), son insuficientes, especialmente si la enfermedad ha avanzado a metástasis.
Ante esta realidad se hace urgente que los pacientes tengan acceso rápido a las innovaciones terapéuticas porque es la única vía de lograr control de la enfermedad y garantizar menos toxicidad, más calidad de vida y mayor sobrevida a largo plazo.
Es el caso de los inhibidores de ciclina que han logrado colocarse como estándares en el manejo de cáncer de mama, porque han ayudado a transformar enfermedades que eran muy graves en patologías en su mayoría curables.
Así lo afirmó el doctor Cristian Villanueva, médico oncólogo, quien ha participado en estudios clínicos sobre innovaciones terapéuticas, durante una entrevista con Resumen de Salud, tras su participación en el Congreso Internacional de Oncología, efectuado en Punta Cana.
Destacó la importancia de los fármacos inhibidores de ciclina como Ribociclib, que según dijo, ayudan a controlar la proliferación celular garantizando una mayor sobrevida de los pacientes.
Gracias a las innovaciones terapéuticas en oncología, hoy día las pacientes con cáncer de mamá metastásico cuentan con beneficios categóricos y viven más tiempo y con mejor calidad de vida, explicó.
El especialista con práctica médica en Francia, aseguró que el cáncer de mama tiene una historia de muy buenas estrategias terapéuticas, “desde hace más de 60 años, es el que más ha avanzado en investigaciones”.
Sin embargo, destacó que hay cánceres de mama, que son más bien una enfermedad en la que hay que poner todo el arsenal terapéutico en el primer año de tratamiento y hay otro tipo de cáncer como el hormono sensible en el que la enfermedad es más bien crónica.
Ante diferentes casos, destacó que se cuenta con medicamentos combinados que permiten evitar la recaída o conseguir que suceda lo más tarde posible.
Apuntó que la enfermedad de cáncer es tan compleja que no es suficiente una sola inhibición, “sino que hay que buscarles inhibiciones complementarias”.
En cuanto a la enfermedad metastásica, en los cánceres hormono sensibles, dijo que, “los inhidores de ciclina permiten tasas de eficacias de doblar los resultados que se conocen hasta ahora, si una paciente tenía una tasa de respuesta de 40 por ciento antes, ahora es sobre 70%”.
Mientras que su la variable de eficacia ofrece control de la enfermedad de 12 meses “ahora con los tratamientos combinados se puede hablar de 24 meses: si la sobrevida media de un paciente con cáncer de mama hormono sensible no llegaba a cuatro años, al día de hoy están en casi 5 años y medio”.
En cuanto al diagnóstico, destacó que mientras más temprano se haga es mucho mejor para poder ofrecer a las pacientes las opciones de terapias que les garantizarán posibilidades de curación, mejor calidad de vida y otros beneficios.
Afirmó que es responsabilidad de los sistemas de salud que las mujeres se realicen los chequeos y tengan acceso a los programas de detección precoz, así como a las mejores opciones terapéuticas.
Advirtió que, lo más importante en la organización del sistema de salud es la prevención y el seguimiento.