El doctor Julio Amado Castaños Guzmán, rector de UNIBE y presidente del Patronato del Hospital General Plaza de la Salud, expuso su parecer en el recien celebrado 3er. Congreso Internacional de Turismo Médico, en un panel sobre «Retos, oportunidades y desafíos del turismo de salud».
El médico hematólogo expuso que el éxito del turismo de salud en la República Dominicana está condicionado por el tipo y los servicios que se ofrecen.
Consideró que, si se supera el tema de la capacitación de los profesionales, restan las instalaciones y las garantías que necesitan los visitantes (pacientes) que van a ser intervenidos y deben ofrecerlas los especialistas de las diversas ramas de la salud involucradas en el sector.
Explicó que a esto se suma las certificaciones nacionales e internacionales que deben disponer tanto los profesionales como los centros de salud.
El también rector de la Universidad Iberoamericana exhortó a sus colegas no dejar de lado los servicios odontológicos, cirugía plástica y otros procedimientos que -según dijo- han servido para promover los servicios de calidad que ofrece el país.
Recordó que “el ejercicio de la medicina ha pasado de ser simple, poco efectivo y relativamente seguro, a ser complejo, más efectivo y potencialmente peligroso, si no se establecen los adecuados controles”.
Sostuvo que si se analizan los retos que se pueden presentar, al ofrecer procedimientos complejos y de tercer nivel, se pueden enfrentar situaciones peligrosas, por lo que recomendó establecer una meta.
De igual forma, el Maestro de la Medicina consideró importante la implementación de un marco legal, con regulaciones, con criterios claros de dominios de ejercicio de la profesión médica.
Aseguró que se debe tomar en cuenta que el turismo de salud no solo involucra a los profesionales de la salud, sino también a inversionistas y grupos locales e inversión extranjera.
Dijo que hace falta una reforma profunda para elevar la calidad en la formación de salud, elemento que calificó de indispensable para el turismo de salud.
Manifestó que países como México, Malasia, Singapur, la India, Costa Rica, Panamá y otros han entendido que el turismo de salud demanda calidad y seguridad de los pacientes y se han adaptado a esos requisitos con normativas y recursos para promover y mejorar sus sistemas.
Agregó que para el desarrollo del turismo de salud se requiere, además del apoyo del Gobierno y liderazgo, políticas de seguridad del paciente, capital humano, gestiones de conocimiento e investigación, calidad y prestigio institucional.
Además, entiende que conlleva altas tecnología, incremento de la movilidad de ciudadanos y cambios de paradigmas que impactan los sistemas de salud.
Por Gabriela Mora