Más de 5.000 personas han muerto por ébola, según la OMS

Se trata de la mayor epidemia de ébola en la historia, con más de 14.000 personas enfermas, en su inmensa mayoría en Liberia, Guinea y Sierra Leona.  

Existen algunos signos de que la tasa de infecciones nuevas podría estar disminuyendo en general en Guinea y Liberia, pero aún hay áreas en esas naciones donde la transmisión sigue siendo alta, y está aumentando en Sierra Leona, señaló la agencia internacional de salud.

Aunque la respuesta al ébola está incrementándose, todavía es insuficiente: en Sierra Leona, por ejemplo, menos de 40% de los casos están en cuarentena, según cálculos de la OMS.     

Preocupantemente, el virus ha continuado apareciendo en nuevos lugares, tanto dentro de los países más afectados como fuera de sus fronteras. El ejemplo más reciente es un nuevo grupo de casos de ébola reportados el miércoles por las autoridades de Malí, un retroceso alarmante en momentos en que el país trata de limitar a la epidemia que azota a otras naciones de la parte occidental de África.     

Una enfermera que trabajaba en una clínica de Bamako, capital de Malí, falleció el martes, y exámenes mostraron posteriormente que tenía ébola, dijo el miércoles el ministro de Comunicaciones Mahamadu Camara.

Se cree que otras dos personas también murieron por ébola, aunque no se les realizaron pruebas para confirmar el padecimiento: un imán, el cual fue atendido por la enfermera en la clínica de Bamako, y un amigo que visitó ahí al hombre.     

El anuncio de los casos nuevos ocurrió apenas un día después de que las autoridades de salud malienses dijeron que no había otros reportes de casos —y mucho menos muertes— desde que una niña de dos años que viajó a Malí desde Guinea sucumbió por el virus a fines de octubre.     

Al menos 75 personas están bajo cuarentena después de los casos nuevos en Bamako, incluidos pacientes y personal del hospital, dijo Ousmane Doumbia, secretario general del Ministerio de Salud de Malí. Varios de los pacientes en cuarentena son soldados que prestan servicio en las fuerzas de paz de las Naciones Unidas en el país, quienes estaban siendo tratados en la clínica por heridas, indicó la fuerza en un comunicado.     

Funcionarios de salubridad están buscando en la ciudad de aproximadamente dos millones de habitantes a las personas que ayudaron a preparar el cadáver del imán para su entierro antes de que se supiera que el cuerpo podía ser altamente contagioso.     

El imán, quien vivía en un poblado pequeño de Malí cerca de la frontera con Guinea, llegó a la Policlínica Pasteur el 25 de octubre a altas horas de la noche. El hombre de 70 años estaba tan enfermo que no pudo hablar ni proporcionar información sobre sus síntomas, según el director de la clínica.     

"Su familia no nos dio toda la información que pudo habernos llevado a sospechar que se tratara de ébola", dijo Dramane Maiga a The Associated Press.     

Pero una de sus esposas, un hijo y un hermano están siendo tratados en una clínica para pacientes con ébola en Gueckedou, Guinea. Otros dos familiares murieron por una "enfermedad no diagnosticada", indicó la OMS.     

La enfermera, mientras tanto, fue hospitalizada el sábado, pero directivos del hospital alertaron al Ministerio de Salud hasta la mañana del lunes. Para cuando los resultados de la prueba estuvieron listos el martes, la mujer de 25 años ya estaba muerta, dijo Maiga.

Fuente www.listindiario.com