Santo Domingo.- En el Día Mundial de la Salud Bucodental, Smile Train, la organización internacional de tratamiento del labio y paladar hendido (LPH), promueve los hábitos y el tratamiento para prevenir enfermedades vinculadas a una mala salud bucal.
“El cuidado de la salud bucal en personas con labio y paladar hendido inicia desde el nacimiento, a través de la educación a los padres y familias sobre las medidas preventivas que ayudan a evitar el desarrollo de enfermedades bucales más comunes, especialmente en la población nacida con LPH y que, a su vez, son completamente prevenibles”, afirma la doctora Mónica Domínguez, directora Global de Programas de Salud Oral de Smile Train.
En el mundo, cada tres minutos nace un niño con labio y paladar hendido y a su vez, se estima que el 90% de las personas con LPH sufren de enfermedades bucodentales.
Se trata de una realidad preocupante, a la que se suman cinco millones de personas con labio y paladar hendido que nunca han recibido ningún tipo de tratamiento.
Por este motivo, Smile Train promueve y visibiliza el tratamiento y los cuidados necesarios para que los niños y niñas que nacieron con LPH, puedan mantener una buena salud bucodental.
La prevención es clave para asegurar que los niños con labio y paladar hendido adquieran hábitos saludables como: cepillarse los dientes luego de cada comida principal; al acostarse y levantarse y disminuir la ingesta de dulces.
Los niños que nacen con LPH enfrentan un mayor riesgo de contraer caries, enfermedad periodontal, dientes no alineados y piezas dentales faltantes y el tratamiento de estas condiciones suele ser doloroso, costoso y a veces inaccesible para muchas familias. Es por ello que la prevención es el primer paso para lograr y mantener una buena salud bucal.
Todos los niños, y especialmente que padecen de LPH, necesitan acceso al tratamiento bucodental para garantizar una vida llena de sonrisas:
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En la etapa que va entre los 0 y los 2 años de vida, los bebés con LPH requieren un seguimiento y cuidado bucodental con mayor detalle. Se recomienda a los padres o cuidadores los siguientes consejos que son de fácil implementación: limpiar las encías del bebé con una gasa suave cada vez que termina de alimentarse; evitar darle bebidas azucaradas o miel ya que esto contribuye a la formación de caries; revisar las encías para observar cómo van saliendo sus primeros dientes y acudir al odontólogo al año de vida del bebé.
Entre los dos y los dieciocho años de edad, los dientes y la boca de los niños y niñas sufren grandes cambios. Y es en esta etapa, donde ellos comienzan a adquirir mayor responsabilidad en el cuidado de su propia salud bucodental. Es un momento propicio para motivarlos a continuar con hábitos saludables tales como: visitar al dentista regularmente; cepillarse los dientes al menos por dos minutos y dos veces al día; usar un cepillo de dientes suave y dentífrico con flúor; utilizar hilo dental; elegir snacks saludables y evitar bebidas con azúcar; como así también usar protector bucal al practicar deportes.
“La salud bucodental impacta en nuestra vida diaria de muchas maneras: cómo hablamos, sonreímos, comemos, en la forma que transmitimos nuestras emociones y nos relacionamos con los que nos rodean. Podemos decir que la boca es el medio que conecta a cada persona con el mundo”, reflexiona la Dra. Domínguez.
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Para conocer más sobre los hábitos saludables recomendados por especialistas en salud bucodental, Smile Train en conjunto con la IDF (World Dental Federation), invitan a visitar sus redes sociales en Instagram y Facebook y sumarse con el hashtag #YoCuidoMiSonrisa para que los niños y niñas con LPH mantengan una buena salud bucal a lo largo de su vida.
