La insatisfacción en la población por la calidad de los servicios públicos aumenta a la par del crecimiento económico, y República Dominicana no escapa a esta realidad. Así lo aseguró el experto internacional en gestión y política en salud, Ramón Abel Castaño, en el marco del XVII Congreso Latinoamericano de Salud auspiciado por la Asociación Latinoamericana de los Sistemas Privados de Salud (Alami) y la Asociación Dominicana de Administradoras de Riesgos de Salud (Adars).
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El especialista detalló que en Latinoamérica y el Caribe, se ha incrementado la clase media con notable mejoría de la calidad de vida, pero simultáneamente ha crecido la insatisfacción con los servicios públicos, erosionando las bases del tejido social y debilitando las instituciones y deslegitimando al Estado.
Durante su conferencia titulada: Perspectivas macroeconómicas en Latinoamérica y oportunidades para los seguros voluntarios, Castaño aportó datos sobre los indicadores de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), los cuales muestran que en la región hubo un período de crecimiento rápido.
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Sin embargo, para el experto en salud pública no solo se incrementó la clase media sino que ésta también desarrolló las mayores expectativas y aspiraciones. A lo que añadió que ante este fenómeno el Estado ha devenido en incapacidad para satisfacer, en calidad y oportunidad, los requerimientos de los sectores acomodados, lo cual crea inconformidad.
Seguros voluntarios, salvavidas de la salud
El ganador del premio José Luis Bobadilla en innovaciones en política sanitaria, por el trabajo Evolución de la Equidad en el Sistema de Salud Colombiano, financiado por Cepal, Ramón Abel Castaño, no dudó en expresar que ´´se debilitan las bases del contrato social, en el que todos aportamos para que el Estado nos garantice el bienestar o la mejoría en la calidad de vida”.
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No obstante consideró que este panorama se presenta como un gran reto para la estabilidad política y la sostenibilidad financiera que abre oportunidades para el desarrollo de nuevas iniciativas empresariales. “Es una duplicidad, pero la experiencia internacional muestra que las personas prefieren pagar los impuestos de la Seguridad Social y a su vez pagar un seguro voluntario, como sustituto o como complemento, para obtener la calidad de atención y servicios que desean”, dijo.
Refirió que en Brasil, México, Argentina, Colombia, Chile, República Dominicana y otros países, han habido períodos de crecimiento del Producto Interno Bruto elevando la inversión pública en salud y reduciendo el gasto de bolsillo de la población, pero simultáneamente ha crecido la inconformidad con los servicios públicos y se están buscando soluciones en el sector privado, especialmente en el área de la salud, con el fortalecimiento de los seguros voluntarios.
