Bávaro.- La Leucemia Linfocítica Crónica (LLC) es una enfermedad mortal incurable que ha tenido grandes cambios en los tratamientos.
Los tratamientos más novedosos están encaminados a utilizar drogas de pequeño tamaño, dirigidas contra alteraciones específicas en las células malignas o en el linfocito interno.
La información la ofreció la doctora Margarita Rodríguez, hematóloga-internista, de México, quien realiza su práctica profesional en Mérida, Yucatán, a una entrevista con Resumen de Salud.
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Destacó que el progreso en el tratamiento ha sido en los últimos seis años sorprendentes, porque hemos alcanzado tazas de respuestas muy altas.
“No podemos hablar de curación, pero los pacientes se mantienen sin la enfermedad viva durante mucho tiempo”.
Asimismo, explicó que los esquemas anteriores que se utilizaban eran más tóxicos y “no alcanzaban la respuesta que vemos ahora con los nuevos tratamientos, en particular hay drogas pequeñas que son inhibidores específicos de ciertas moléculas que se expresan en estas células que han logrado mejores respuestas”.
Uno de estos tratamientos es el Benetoplas, que ha sido una de las innovaciones logrando las combinaciones de los anticuerpos monoclonales.
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La doctora conversó con Resumen de Salud tras ofrecer una conferencia en el país sobre “La evolución que ha tenido el tratamiento de la Leucemia Linfocitica Crónica en los últimos 50 años”, ofrecida en el Congreso Internacional de Hematología.
Expresó que son los nuevos fármacos que se han desarrollado en los últimos años y que han sido aprobados por su efectivida, los que ayudan en esta enfermedad.
Destacó que el estudio Murano “es utilizar la combinación de dos fármacos Benetoplas y Ritusimab, el último que tradicionalmente se ha usado en Leucemia Lifositica Crónica combinado con otras drogas al sumar estos dos se aumenta el beneficio para los pacientes”.
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“Si ya era de gran beneficio utilizar Benetoplas solo sin combinación cuando se adiciona Ritusimab nos permite usar esta terapia por menos tiempo (seis meses de tratamiento), después Benetoplas solo durante dos años”.
Explicó que la tasa de respuesta fue muy alta a más de tres años que fue la última revisión que se hizo, donde se demostró que los pacientes se mantienen por encima del 80% en remisión, sin actividad de la enfermedad.
Finalmente, expresó que en cuanto a las estadísticas de la enfermedad, dijo que es poco frecuente, pero si tomamos las mundiales es regional de poblaciones caucásicas más que de poblaciones mestizas, lo que habla de que la frecuencia se mantiene menor del 15%.
